El grupo desembolsa más de cinco millones de euros para expandir su negocio a la energía solar
28 ago 2018 . Actualizado a las 05:00 h.La gallega Greenalia, compañía especializada en las energías renovables, ha comprado cinco proyectos fotovoltaicos a la manchega Dayra Energy. El negocio se ha hecho a través de una absorción, de forma que, aunque sean sociedades limitadas distintas, dependen por completo de una filial de Greenalia, Solar Power SL.
La empresa gallega, con sede en A Coruña, adquiere un total de cinco plantas fotovoltaicas con una potencia total de 230 megavatios. Tres de ellas están situadas en la zona de Extremadura, y suman una potencia total de 129,8 MW. Las dos restantes se localizan en Andalucía, y llegan a generar 99,8 MW.
Esta compra le supondrá a la compañía un desembolso de 5,3 millones de euros, incluyendo un primer pago de 160.260 euros.
Para Greenalia esta operación le supone ir avanzando en su proyecto de convertirse en un grupo de energías renovables en todos sus ámbitos. Está presente en los negocios energéticos de la biomasa, la eólica y la térmica, y con esta transacción se estrena en el sector de la energía solar.
Por su parte, Dayra Energy, con sede el Albacete, está especializada en el desarrollo de energía eólica y fotovoltaica.
Greenalia se puso en marcha en el año 1996, iniciándose en la actividad forestal. Diez años después amplió su campo de acción comenzando a trabajar con las energías renovables eléctricas a través de la biomasa y lo eólico, en los que actualmente cuenta con un potencial total de 400 megavatios (con 131 y 269 respectivamente).
En el año 2014 empezó a trabajar en logística y actualmente cuenta con transporte terrestre, marino y almacenaje, entre otros servicios. Ese mismo año se inició también en la producción de energías térmicas con biocombustibles. Asimismo se inició en el sector industrial, ampliando la producción de biocombustibles en el 2015, negocio en el que se siguió expandiendo durante el ejercicio del 2016.
Greenalia marcó otro punto de inflexión al entrar al Mercado Alternativo Bursátil (MAB), una especie de bolsa para pymes, y este mismo año se incorporó al grupo de las firmas con mayor volumen de contratación de este mercado. Tres meses después de su salida al MAB, la empresa gallega ya se encontraba entre las primeras compañías del índice y se había revalorizado un 38,92 %, alcanzando una capitalización de 59,93 millones de euros.
Además, tiene en marcha su proyecto más ambicioso, la construcción de una planta de biomasa en Curtis (A Coruña), en el polígono industrial de Teixeiro. Será, si se cumplen las previsiones del grupo, la mayor instalación de este tipo en Galicia. El presupuesto de la obra asciende a 70 millones de euros. Ya tiene luz verde del Concello, y antes de la Xunta, y ha adjudicado la obra a un consorcio formado por Acciona y e Imasa, una ingeniería gallega.