La industria gallega aspira a pagar un 50 % menos por el precio de la energía

F. Fernández LA VOZ

ECONOMÍA

Eliseo Trigo

Propone, junto a la Consellería de Industria, más incentivos para el sector

27 mar 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

La Consellería de Industria, junto a las principales empresas electrointensivas que operan en Galicia -y que, según la Xunta, dan empleo a unos 5.000 operarios-, ha enviado al Ministerio de Industria las alegaciones al estatuto que recoge medidas de compensación para ese tipo de compañías con un elevado consumo de electricidad, y que no contenta a nadie. A las industrias, menos, porque consideran que las bonificaciones propuestas son insuficientes para equiparar el precio de la energía en España con el del resto de países del entorno. Por tanto, las fábricas de aquí compiten en condiciones desiguales y de desventaja.

Las medidas incluidas en el estatuto -que el Gobierno quiere aprobar dos días de las elecciones del 28 de abril- reducirían el coste del megavatio hora en unos 15 euros. Un ahorro similar se alcanzaría si se incorporan las recogidas en las alegaciones que partieron de la consellería. En suma, unos 30 euros menos, según estimaciones del sector.

Esto supondría para las industrias electrointensivas pagar la mitad de lo que cuesta el megavatio hora en el mercado mayoristas. Aunque en febrero el precio medio bajó hasta los 54 euros, en enero rondó los 60.

La patronal del sector, la asociación de empresas con gran consumo de energía (AEGE), calculaba hace unos días que en España pagaban 20 euros más que la industria gala y 25 por encima que la alemana. Con lo cual, los precios se igualarían si finalmente se aceptasen las propuestas gallegas.

El estatuto propone exenciones a las empresas electrointensivas en conceptos incluidos en la factura eléctrica para financiar los pagos por capacidad y el servicio de interrumpibilidad -en ambos casos, incentivos a las compañías-. Otro mecanismo sería el pago de compensaciones por las emisiones indirectas de dióxido de carbono, con un importe previsto para este año de 76 millones. El sector contaba con que fueran 200 millones.

La Xunta incorpora a estas propuestas una para que estas industrias estén casi exentas de los peajes de transporte -otro concepto de la factura que financia los gastos de gestionar la red eléctrica de alta tensión-. Además, la consellería recupera la idea inicial del Gobierno de distinguir a los consumidores electrointensivos en función de su consumo, y que finalmente ha quedado fuera de la propuesta de estatuto.

En Galicia, empresas fuertemente dependientes del precio de la energía son Alcoa (que amenaza con cerrar parcialmente las fábricas de A Coruña y Avilés y dice que la de San Cibrao está en peligro) y Ferroatlántica (que está aplicando un expediente de regulación de empleo temporal para casi 400 trabajadores en sus plantas gallegas). 

Lluvia de alegaciones

También integran ese listado de industrias electrointensivas Celsa, Showa Denko (antes, SGL Carbón) y Megasa, entre otras.

Al estatuto presentarán alegaciones los comités de empresa de las plantas de Alcoa, sindicatos, partidos políticos (como el BNG) y también las propias industrias afectadas.