Pablo Isla asciende a Carlos Crespo, su hombre de confianza, a consejero delegado
ECONOMÍA
El nombramiento del directivo, que en la práctica ya era número dos de Inditex, será efectivo en julio
24 may 2019 . Actualizado a las 07:48 h.El puesto de consejero delegado de Inditex, vacante desde que en el 2011 Amancio Ortega dejó sus funciones ejecutivas en la empresa y cedió a Pablo Isla la presidencia, volverá a estar ocupado en julio. Será cuando la junta de accionistas ratifique la propuesta presentada ayer por el propio Isla para aupar a su mano derecha, Carlos Crespo, al segundo peldaño del organigrama. Una posición que ya ocupaba en la práctica en su actual cargo de director general de operaciones, y que ahora se oficializa.
Crespo, de 48 años, es un hombre de la casa, que lleva desde el 2001 en Inditex. Tras iniciar su carrera en el sector de la auditoría, se incorporó a la textil como responsable de políticas contables dentro del departamento de administración financiera. Tras dirigir la gestión de existencias en los centros logísticos, en el 2005, año en el que Isla desembarcó en el grupo, asumió la responsabilidad de dirigir la auditoría interna, puesto que ocupó hasta que en el 2018 fue designado director general de operaciones.
Para que el ascenso se haga oficial, Crespo debe ser nombrado primero consejero de la compañía. Para ello, tal y como comunicó ayer Inditex al mercado, se colocarán dos sillas más en el máximo órgano directivo. En una se sentará el nuevo consejero delegado, mientras que la otra no tiene aún quien la ocupe, ya que la empresa ha optado por abrir un proceso de selección para designar a ese segundo consejero adicional. Los dos nombramientos se someterán en julio a la junta de accionistas, en la que Ortega cuenta con más de un 59 % de los votos y en la que también se procederá a la reelección de Pablo Isla como presidente ejecutivo.
La decisión de nombrar a Crespo como consejero delegado, además de reforzar la cúpula de Inditex, se interpreta también como un guiño a los mercados financieros internacionales, por cuanto evidencia la importancia que la compañía le da a retos como la transformación digital o la sostenibilidad. Uno de sus objetivos será que todas las tiendas del grupo sean plenamente digitales, integradas con el canal on-line y sostenibles el año que viene. Así, la tecnología RFID, que ya está completamente desplegada en Zara, Massimo Dutti y Uterqüe, se terminará de implantar en el resto de tiendas y marcas del grupo en el 2020, ejercicio en el que también culminará el programa de implantación de tiendas ecoeficientes, completado hoy en un 86 %.
«Estoy muy ilusionado de poder participar en este momento de la compañía, donde tanto la transformación digital como la sostenibilidad en todas sus vertientes suponen retos apasionantes para cuyo desarrollo son imprescindibles innovación, espíritu emprendedor y trabajo en equipo, aspectos intrínsecos a la cultura de nuestra empresa», aseguró Crespo.
El cambio en la cúpula de Inditex se produce una década antes de que Isla alcance los 68 años, el tope de edad establecido para los consejeros de la compañía.