El 85 % de los trabajos que habrá en el año 2030 todavía no se han inventado

Robots, drones, realidad virtual, ciencia de datos, Internet de las cosas... Suena a ciencia ficción. Para algunos incluso a palabras lejanas y sacadas de los libros más sesudos. Nada más lejos de la realidad. Todos estos artilugios han venido para quedarse y revolucionar el mundo.

Y como muestra, un botón: casi nueve de cada diez trabajos que encontraremos en el mundo en el 2030 todavía no se han inventado. El típico «¿Qué quieres ser de mayor?» al que los niños llevan décadas respondiendo con profesiones de lo más tradicional se reinventará por completo en tan solo una década. Según el informe Talent Trends de la empresa de recursos humanos Randstad, los perfiles más solicitados en los próximos años serán aquellos que estén formados y cuenten con experiencia en las necesidades más innovadoras.

El profesional que todas las empresas se rifarán en el futuro será el que se muestre flexible, independiente, que tenga un perfil transversal y que esté dispuesto a cambiar de puesto, adaptándose a los nuevos retos de una manera dinámica. Defienden los que saben que, fichar a un asalariado con estas características, permitirá a los negocios del mañana anticiparse a las necesidades de sus clientes, ofreciéndoles mejores productos y servicios.

Y lo de buscar talento no será una cuestión trivial. Hacerse con una plantilla formada por los mejores debe ser una de las primeras preocupaciones de los directivos. El informe de Randstad apunta a que el 80 % de los responsables de recursos humanos consideran que la estrategia de adquisición de talento es más importante que otras como, por ejemplo, el ahorro de costes.

Los robots, ¿una amenaza?

La irrupción de los robots en el mundo laboral lleva ya años generando temores entre los empleados de carne y hueso. ¿Puede un puñado de metal y tornillos quitarnos el trabajo? Los expertos de Randstad lanzan un mensaje tranquilizador: «La robótica no tiene por qué estar llamada a sustituir el trabajo de los profesionales, sino a dar respuesta a aquellas vacantes difíciles de cubrir en sectores como construcción o manufacturas».

Muchas empresas ya están apostando por autómatas para puestos repetitivos de ensamblaje o para realizar tareas peligrosas para el ser humano. Donde muchos ven una amenaza, otros perciben una oportunidad de transición hacia el mercado laboral del futuro.

Y no es la única posibilidad que abre la llegada de los androides. Porque estos autómatas se han convertido en un importante aliado para la gestión de los recursos humanos. El 96 % de los responsables de la contratación consideran que la tecnología mejora la atracción, el compromiso y la retención de talento, una cifra que en el 2016 se situaba solo en el 79 %.

La tecnología más avanzada ya está aquí. Y ha venido para quedarse.

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