La Unión Europea impondrá aranceles a Estados Unidos en represalia

J. M. Camarero MADRID /COLPISA

ECONOMÍA

Marta Fernández Jara - Europa Pr

Bruselas aplicará tasas por las ayudas de Washington a Boing, evaluadas en 10.700 millones

18 oct 2019 . Actualizado a las 20:02 h.

La Unión Europea no tiene «otra opción» que tomar represalias. Así lo anunció la comisaria europea de Comercio, Cecilia Malmstrom, una vez que se ha materializado la imposición de aranceles a 160 productos europeos por parte de la Administración norteamericana. «Lamentamos la decisión de Estados Unidos de ir adelante con los aranceles», tras el fracaso de los esfuerzos por negociar una tregua con Washington. «Esta medida no nos deja otra opción», precisó la comisaria, y, a su debido tiempo, la UE decidirá también sobre la aplicación de impuestos a productos norteamericanos que accedan al mercado europeo, por un valor de unos 10.700 millones de euros». La UE podría ser autorizada el año próximo por la OMC a adoptar esta medida por las subvenciones que Washington habría dado a su competidora, Boeing. De hecho, hace justo una semana la Comisión instó a la Administración Trump en una carta a sentarse a negociar la aplicación de estas tasas aduaneras contra las importaciones europeas, porque si no lo hacían, responderían con la misma moneda que EE UU. Esto es, con aranceles propios.

En el caso de España, uno de los países más afectados por esa medida, las tasas se centran sobre todo en el sector agroalimentario donde han puesto en jaque ventas por más de 700 millones de euros. 

Defensa española

Ante esta situación, el presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez afirmó este viernes desde Bruselas, donde ha tenido lugar la última cumbre comunitaria, que «España está liderando la respuesta comunitaria para defender los productos afectados» por el «atropello arancelario de Trump». «Seguir apoyando a nuestros agricultores es una línea roja, y así se lo hemos hecho saber a nuestros homólogos europeos», indicó Sánchez.

En términos parecidos se expresó la vicepresidenta del Gobierno en funciones, Carmen Calvo, quien afirmó que el Ejecutivo intentará jugar sus cartas en las relaciones bilaterales con EE. UU. para tratar de resolver el problema que afecta a buena parte del campo. Calvo señaló que, aunque es una situación que hay que afrontar en el marco de la política común europea, España se ve afectada «de manera muy injusta», puesto que se trata de «productos muy importantes dentro del modelo agroalimentario que tienen gran peso» en el conjunto del Producto Interior Bruto (PIB).

La vicepresidenta señaló que el Ejecutivo es «muy consciente» de cómo puede afectar esta situación a algunos productos» y por ello el ministro de Agricultura en funciones, Luis Planas, y la delegación española «han hecho ya reservas suficientes acerca de las ayudas que se pueden necesitar si esta situación se convierte en irreversible».