Josef Ajram: «Trabajo dos horas al día, esa es mi gran riqueza»

D. Casas REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

MARCOS MÍGUEZ

«Uno de los días que más dinero gané en bolsa fue tras la consulta del 'brexit'», confiesa el «trader» más mediático

06 nov 2019 . Actualizado a las 08:55 h.

Los tatuajes recubren la piel de una buena parte de su torso y de sus brazos. Su imagen resulta, cuando menos, poco usual en el mundillo bursátil, precisamente en el que mejor se maneja, con sus luces y sus sombras. Es trader, ironman, colecciona coches, escribe libros, imparte cursos y conferencias... Vive, o vivía, a toda velocidad, al menos así lo transmite. Hasta que el año pasado cumplió 40 años. No es que este barcelonés de padre sirio y madre española haya bajado el ritmo, sino que ha decidido reorganizar los tiempos. Continúa con su método de inversiones a corto plazo, que tantos dividendos le ha reportado, pero con más pausa. Recientemente impartió una conferencia organizada por AJE A Coruña.

-Su profesión es invertir en bolsa y hasta tiene un método propio.

-Me dedico a esto desde hace 20 años, y yo la trato como mera estadística. Busco puntos de entrada y de salida en cotizaciones donde haya probabilidades de éxito, controlando mucho los riesgos. Ir a no perder y a seleccionar muy bien las operaciones. Tengo muy presente una de las reglas de oro de la especulación en bolsa, que es mantener siempre el riesgo bajo control.

-Su estrategia tiene éxito para usted, pero no ha sido así cuando fue agente inversor.

-Ahora invierto para mí mismo. Si pierdo, pago; y si gano, ingreso, sin más. He intentado desarrollar mi proyecto para otros clientes a través de una sociedad de valores, pero me he dado cuenta de que no es extrapolable porque el dinamismo de mis estrategias no es replicable para muchos inversores a la vez.

-¿Es buen conocedor de los entresijos de la especulación?

-Si especular es intentar obtener la mayor rentabilidad con los menores recursos posibles, pues sí, soy especulador.

-Cuando falla una operación, ¿entiende que forma parte del juego del mercado, se resigna?

-Ni me resigno, ni es el juego del mercado. Es estadística. Lo que yo he elaborado son estrategias que, repetidas en el tiempo de la misma manera, tienen una probabilidad de éxito superior a la de pérdida. A nadie le gusta perder, pero forma parte de este trabajo.

-Entre sus hazañas bursátiles más sonadas fue el pellizco bursátil que le reportó el atentado de las Torres Gemelas. ¿Se arrepiente de aprovecharse de aquellas circunstancias?

-No es que me arrepienta o no. Yo no quiero que haya un atentado nunca en la vida. Lamentablemente, el 11-S no está entre los días que más dinero he ganado, simplemente lo que hice fue aprovechar la volatilidad y el volumen que había en los mercados. Pero ojalá nunca hubiera ganado ese dinero, porque significaría que semejante desgracia no hubiera ocurrido. Fue tal el pánico que todas las empresas del mundo bajaron y yo lo utilicé.

-¿Y cuál fue el día que ganó más dinero, entonces?

-Sin duda, uno de los mejores fue cuando se conocieron los resultados del brexit en el Reino Unido, en junio del 2016. También hice operaciones, faltaría más.

-Todo un experto en aprovechar oportunidades extraordinarias.

-Es mi trabajo. Intentar aprovechar una gran rentabilidad en poco tiempo. Cuando suceden acontecimientos extraordinarios, como el brexit, para nosotros es la panacea. Son actos de irracionalidad humana a los que nosotros intentamos poner cordura.

-¿Con qué se ha hecho más rico: con la bolsa, los deportes, las conferencias...? Porque le da un poco a todo.

-En este país, pagando el 50 % en impuestos, es imposible hacerse rico. Soy rico en que soy dueño de mi vida, trabajo dos horas al día y eso es una gran riqueza. Lo bueno de la bolsa es que las nuevas tecnologías han sido imprescindibles, porque me permiten realizar cualquiera de esas actividades desde cualquier lugar del mundo, lo que permite estar con mi familia el máximo tiempo posible. Esa es la riqueza. Quizás podía ganar más dinero en un banco de inversiones, en la City de Londres, pero no tendría este activo.