
Se prevé que el acuerdo se firme «en cuestión de poco tiempo»
22 nov 2019 . Actualizado a las 20:01 h.Tras varios meses de negociación, Globalia y Barceló hacían ayer efectivo su apretón de manos. Las dos agencias llegaron ayer a un acuerdo para fusionar sus divisiones de viajes y crear así un gran grupo turístico. Se prevé, tal y como confirmaron fuentes del sector a Europa Press, que ambas dejen su rúbrica en un acuerdo que se firmará «en cuestión de poco tiempo».
El timón de las negociaciones lo llevaron los consejeros delegados de ambos grupos turísticos: Javier Hidalgo y Simón Pedro Barceló. Ambos decidieron que la fusión incluiría las divisiones mayoristas y minoristas de las compañías y que se realizaría al 50 %.
Ahora solo falta que Competencia de el visto bueno a una operación cuyo resultado será un operador con unos 1.500 puntos de venta y una facturación conjunta de 3.700 millones de euros. Pero no es la primera vez que las compañías caminan de la mano. De hecho, ambas ya colaboraban en la UTE, Mundosenior, creada para presentarse a concurso de los viajes del Imserso.
Las aportaciones
A la fusión, Globalia aporta sus agencias de viajes minoristas Viajes Ecuador y Halcón Viajes; así como la red de agencias de viajes independientes asociadas Geomoon. Y la cosa no se queda ahí, porque también pondrá la maorista Travelplan, el banco de camas Welcome Beds, la división de viajes corporativos Globalia Corporate Travel, la agencia de viajes y eventos Globalia Meetings & Events y Globalia Autocares.
Por su parte, Barceló, a través de Ávoris, incluye las agencias de viajes minoristas B the Travel Brand, B the Travel Brand & Catai; BCD Travel y BCD Meetings & Events y la aerolínea evelop!, entre otras marcas. De este modo, unos 4.775 trabajadores pasarían a estar englobados por esta nueva sociedad conjunta, aunque se desconoce si la intención es mantener la estructura laboral actual.
Este anuncio se produce semanas después de que Globalia anunciara la venta de su aerolínea Air Europa a IAG, matriz de Iberia. Esta operación, valorada en unos 1.000 millones de euros, también está sujeta todavía a la aprobación de las autoridades de Competencia.