Los préstamos en vigilancia especial se acercan a los 82.000 millones de euros y el organismo ve riesgo de contracción del crédito
29 abr 2021 . Actualizado a las 19:52 h.El ritmo de vacunación avanza y las medidas contra la crisis han evitado males mayores. pero los riesgos de la pandemia siguen latentes y cualquier paso en falso puede dar al traste con la recuperación. Esta es una de las principales conclusiones del Informe de Estabilidad Financiera de primavera del Banco de España, en el que el organismo advierte de la «fragilidad financiera» que aún presentan muchos hogares españoles. El organismo deja la puerta abierta a una evolución negativa de la pandemia. Y eso traería «efectos negativos en términos de destrucción del tejido productivo, incremento del desempleo y, por tanto, deterioro de las rentas y la capacidad de pago de las deudas de hogares y empresas». Es decir, acabaría en un aumento de la morosidad y, con ella, aparecería el riesgo de contracción del crédito entre unas entidades que ahora más que nunca deben evitar que la crisis sanitaria, que ya es económica, se convierta en una crisis financiera.
La institución comandada por Pablo Hernández de Cos deja claro que la vulnerabilidad de la economía sigue siendo extrema. Considera que el aumento del ahorro y la reducción del volumen de crédito «oculta la existencia de segmentos que han visto incrementar de manera significativa» ese grado de fragilidad. Es más, recuerdan que esa tasa de ahorro que se ha disparado hasta rozar el 15 % de la renta disponible no engloba a todos por igual. «La riqueza más líquida se concentra en los hogares menos vulnerables», aseguran, constatando que aquellos más afectados por la crisis son los que precisamente han visto reducido el crédito bancario más que el resto.
Señales de alerta
Esta situación no solo amenaza la recuperación, sino también la estabilidad bancaria. Y es que pese a que las medidas contra la crisis han frenado el temido repunte de la morosidad en los últimos meses, los datos empiezan a reflejar las primeras señales de alarma. Según el informe presentado este jueves, un 36 % de los préstamos avalados por el ICO -una de las medidas estrella para hacer frente a la pandemia- está ya en el cajón de vigilancia especial, en el que los bancos guardan los créditos que sin haber registrado aún impagos.