Íñigo Fernández de Mesa: «Es posible que las firmas acaben trasladando los costes»

Las empresas gallegas y españolas ya están viendo cómo sus márgenes de beneficio se acortan. Hace seis meses, exportadores e importadores confiaban en que la situación se relajaría en verano, pero el vicepresidente de la patronal CEOE, Íñigo Fernández de Mesa, cree que hasta el 2022 no habrá tregua.

-¿Hasta cuándo pueden aguantar las empresas sin repercutir las subidas en el cliente?

-Se supone que esto tiene que ser temporal [...]. El sector manufacturero, que es tremendamente competitivo, y que le cuesta trasladar a los precios ese aumento de los costes, está absorbiendo ese aumento con menores márgenes. Lo normal es que poco a poco esta situación se vaya normalizando. No sé si en un mes, dos o cuatro. Sí es posible que algunas firmas, parcialmente, acaben trasladando los costes.

-Las hay que están financiando sus importaciones. ¿Hay problemas para afrontar las próximas campañas?

-El problema de financiación no lo he detectado. Hay un volumen de liquidez importante en el mercado. Tenemos un sector financiero muy sano, saludable y deseoso de financiar operaciones rentables. Habrá problemas con algún producto concreto, pero quedan cuatro meses para Navidad y siempre hay bienes sustitutivos. De aquí al 2022 estará todo normalizado.

-¿Estos problemas en el transporte y el suministro de materias primas están dando ventaja a las empresas chinas?

-No tenemos que culpar al resto del mundo de nuestros éxitos o fracasos. Lo importante es emprender reformas estructurales, tener un mercado de trabajo que funcione bien, tener gente bien formada y aumentar la productividad. Y que los salarios estén vinculados a la productividad. No hay que mirar tanto para afuera.

-¿Estos problemas de transporte y abastecimiento pueden poner en riesgo la ejecución de ayudas europeas?

-Si hubiera problemas de suministro de materias primas, no sería problema exclusivo de España y no sería excusa para aprovechar los recursos europeos.

-¿Se equivocaron las empresas españolas al deslocalizar la producción a China?

-El problema del transporte marítimo es coyuntural. Lo que ocurre es que muchas empresas están reconsiderando, por motivos de seguridad del suministro y no tanto por el coste, cambiar parte de las cadenas de producción a otros destinos diversificados. Hay que ver a medio y largo plazo cómo evoluciona [...]. Si se produjera, sería una oportunidad para España para mantener en nuestro territorio determinadas producciones.

-¿En qué sectores?

-España no es solo un país turístico, somos muy exportadores [...]. No hay solo un sector susceptible de localizarse, hay muchos: industria química, bienes intermedios, farma, industria de componentes de automóvil. Tenemos mucha inversión que atraer del extranjero, pero hace falta simplificación administrativa, facilidades para emprender, un sistema fiscal eficiente, no sobrecargar el empleo de costes, ya que España es uno de los países de la Unión Europea que mayores cargas de cotizaciones sociales soporta. Si no se hace, veremos perdida una oportunidad.

«No hay que estigmatizar a las navieras»

-¿Esta situación de tensión en el mercado puede afectar al empleo? ¿Habrá despidos?

-El sector privado se ajusta siempre en positivo. Posiblemente haya cambios en la pauta de consumo. Es importante facilitar al sector privado la adaptación, que la gente se pueda mover de sectores de menos demanda a más demanda [...]. Posiblemente estos cambios se produzcan en sectores con menos productividad. El entorno fiscal y regulatorio tiene que ser bueno, el marcado de trabajo tiene que facilitar la transición. Viviremos un momento de muchos cambios en la economía y debemos apoyar ese cambio empresarial, no hacerlo más complicado.

-Han acusado a navieras de subir precios de forma abusiva. ¿Comparte esa opinión?

-Es uno de los sectores que más han sufrido con la pandemia [en referencia a las españolas]. El transporte marítimo ha sido quizás de los más afectados. Tuvo que hacer frente a un fuerte endeudamiento para seguir adelante con sus operaciones y lejos de estigmatizar a las navieras hay que ayudarlas. Es un sector estratégico.

-¿Cómo se explica entonces una subida del 700 % en los fletes?

-Ha habido un aumento grande del coste de las materias primas y han tenido que asumir enormes pérdidas durante las crisis, pagándolo con cargo al capital de la empresa. Posiblemente este aumento de precios es de carácter temporal.

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