Rusia, al borde de la quiebra, tras pagar los intereses en rublos en lugar de en dólares

Rusia está un paso más cerca del impago. Llegó la hora de abonar los 117,2 millones de dólares de intereses de una emisión de deuda que vencía ayer, y asegura el país que los pagó. Pero, en rublos. Tenía que haberlo hecho en dólares. Y el no hacerlo equivale a la antesala de la suspensión de pagos (default que se dice en la siempre complicada jerga financiera).

 De hecho, la agencia de calificación de riegos Fitch ya anunció ayer que considera equivalente a una suspensión de pagos el abono del cupón de esa emisión de deuda en rublos en lugar de en dólares, aunque Rusia dispone todavía de un período de gracia de 30 días para cumplir sus obligaciones, hasta mediados de abril y evitar así la quiebra. De no hacerlo, incurriría en el primer incumplimiento del pago de la deuda externa desde la Revolución Bolchevique de 1917.

Y no es que el país no tenga dinero para hacer frente a sus compromisos. Tiene recursos suficientes para hacer frente a la factura. Pero tiene congeladas la mitad de sus reservas en moneda extranjera —300.000 de los 643.000 millones de dólares—, de ahí sus dificultades para pagar en dólares.

Solo este mes debe devolver a los inversores otros 614 millones de dólares.

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