El Gobierno admite que necesita más tiempo para ejecutar los fondos europeos

La Voz REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

Álvaro Ballesteros | EUROPAPRESS

En una declaración conjunta con Portugal, pide «flexibilizar» los plazos

05 nov 2022 . Actualizado a las 19:26 h.

El Gobierno de Pedro Sánchez reconoció este viernes que necesita más tiempo para poder ejecutar los fondos europeos. Y lo ha hecho públicamente y con la ayuda de un importante socio. Coincidiendo con la cumbre hispano-lusa celebrada este viernes en la ciudad portuguesa de Viana do Castelo, los Ejecutivos de España y Portugal decidieron unir sus voces para firmar una declaración conjunta en la que instan a la Unión Europea a «flexibilizar» el calendario para la ejecución de las inversiones financiadas a través de los Planes de Recuperación y Resiliencia. El documento, que lleva la rúbrica de Pedro Sánchez y de António Costa, alega que la actual situación que atraviesa el mundo exige algo más de transigencia en los plazos.

«Ambos países reafirman la rápida aplicación de los Planes de Recuperación y Resiliencia es esencial para contribuir al fortalecimiento de las economías europeas y apoyar la transición hacia una economía más ecológica, sostenible y digital», aseguran ambos Ejecutivos, para acto seguido solicitar algo más de margen: «Conscientes del grado de incertidumbre del actual contexto geopolítico y del impacto de sus consecuencias económicas y financieras —especialmente la inflación y la escasez de materias primas y materiales de construcción— consideran imprescindible flexibilizar el calendario acordado para la realización de las inversiones de los Planes de Recuperación y Resiliencia», resumen. Eso sí, sin que esta dilatación en los plazos implique a algunos de los compromisos adquiridos: «Sin que ello modifique el calendario de aplicación de las reformas acordadas».

El tiempo corre en contra del Ejecutivo. Tal y como recoge el reglamento europeo, el 70 % de los fondos deben estar «asignados o comprometidos jurídicamente» a finales de este mismo año y el 30 % restante el 31 de diciembre del 2023. Algo más de margen tienen en lo que respecta al límite temporal para la ejecución real, cuya fecha límite es el 31 de agosto del 2026.

A pesar de que los de Sánchez juegan a contra reloj, el dinero no acaba de fluir al ritmo que debería. Hace unas semanas, la agencia Bloomberg aseguraba que España iba con retraso en la creación de un mecanismo de auditoría de los fondos. Rápidamente, la Comisión Europea lanzaba un capote al Ejecutivo patrio. Desde Bruselas confirmaban que «en ningún caso» se había producido una congelación de los fondos. Pero la noticia provocaba un pequeño terremoto en los despachos de Moncloa. Pocos días después, el Gobierno relevaba a Rocío Frutos Ibor, directora general del Plan y del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia, para poner en su lugar a Jorge Fabra Portela, que desde febrero del 2021 ocupaba el puesto de subdirector general de Programación en la Dirección General del Plan y del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia.

Tercer desembolso

A pesar de reconocer que necesitan algo más de tiempo, Moncloa ya ultima la solicitud de pago del tercer tramo de los fondos del mecanismo. Así lo admitió hace una semana la ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, que aseguró que no espera «ningún problema» con este tercer pago de 6.000 millones de euros. «Estamos trabajando estrechamente con la Comisión Europea, constantemente con un diálogo muy constructivo para presentar la solicitud del tercer pago y que, por supuesto, no haya ningún problema con el mismo», resumió Calviño.

Sánchez insiste en que mantendrá su plan de impuestos a la banca

Tras el crítico dictamen no vinculante del Banco Central Europeo (BCE) poniendo en duda el diseño del nuevo impuesto a la banca que ha impulsado el Ejecutivo de España, Pedro Sánchez volvió ayer a la carga para insistir en que continuará por este camino. Volvió a afirmar que seguirá con su hoja de ruta de aprobar unos gravámenes «para que los que estén arriba apoyen a los que están abajo». Sobre todo, alegó, ante unas circunstancias «tan dramáticas» como las que ha provocado la guerra en Ucrania. El dirigente socialista reivindicó la forma en la que su Ejecutivo sabe «qué soluciones» hay que dar a las épocas de vacas flacas, frente a «la respuesta neoliberal» que se dio durante la anterior crisis financiera.