Éxodo masivo de trabajadores y cierre de las oficinas de Twitter tras vencer el ultimátum de Elon Musk
ECONOMÍA
Cientos de empleados han optado por dejar la compañía al negarse a trabajar más horas bajo la amenaza de despido. En la red social se ha convertido en tendencia la etiqueta #RIPTwitter. La vicepresidenta Nadia Calviño abre la puerta a que el Gobierno abandone la plataforma si deja de ofrecer certidumbre
18 nov 2022 . Actualizado a las 17:18 h.La red social Twitter ha cerrado sus oficinas después de que cientos de empleados hayan optado por dejar la compañía al negarse a trabajar más horas bajo la amenaza de despido por parte del magnate Elon Musk, quien compró la plataforma a finales de octubre.
La empresa ha tomado la decisión debido al temor de que algunos trabajadores «pudieran sabotear la red social», pidiendo a los empleados que estaban presentes que abandonaran las oficinas hasta el próximo lunes 21 de noviembre, según ha informado CNN.
Además del cierre de sus sedes, Twitter ha cerrado el acceso a las herramientas de comunicación interna y a los dispositivos de la compañía en manos de los trabajadores, tal y como hizo hace unas semanas al despedir al 50 por ciento de la plantilla, según recoge Europa Press.
Esta intensa renuncia de trabajadores tiene lugar después de que el multimillonario Elon Musk les hiciera un ultimátum para que se comprometieran a trabajar de manera «extremadamente dura» en la empresa o se fueran, instándoles a tomar una decisión antes de la tarde del jueves.
Cuando venció el plazo centenares de trabajadores se han despedido a través de las herramientas de comunicación interna de Twitter, aceptando la oferta de Musk de recibir tres meses de sueldo si optaban por dejar su puesto, según la citada cadena.
Ante esta situación, ha crecido el temor entre los usuarios de la red social de que esta finalmente cierre, tal y como han augurado algunos extrabajadores de la compañía, que han afirmado que no existe un cupo mínimo de ingenieros a cargo de alguno de los sistemas críticos, lo que podría provocar que en algún momento la plataforma deje de funcionar.
«Un producto envenenado por dentro y por fuera»
Uno de los empleados que ha decidido rechazar el ultimátum de Musk ha detallado a la CNN sus motivos por los que ha preferido dejar de trabajar en la compañía, asegurando que no quiere quedarse para construir «un producto que está siendo envenenado por dentro y por fuera».
«La gente no quiere sacrificar su salud mental y su vida familiar para hacer más rico al hombre más rico del mundo», ha afirmado otro empleado, consultado por CNN.
En la propia red social Twitter se han convertido en trending topic varios hashtags relativas a la crisis. Dos de las más destacadas en España son #RIPTwitter y #TwitterOFF
Fiel a su estilo, Elon Musk ha reaccionado ante la tormenta desatada publicando que se quedan «los mejores» y dice que no está «muy preocupado». También ha publicado memes relacionados con la hipotética muerte de Twitter. Y se ha jactado de que las sucesivas polémicas han disparado el uso de la plataforma.
Calviño abre la puerta a que el Gobierno abandone la plataforma
La vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital, Nadia Calviño, ha abierto este viernes la puerta a que el Gobierno deje de usar Twitter como canal de comunicación si deja de ofrecer «seguridad» y «certezas» sobre la veracidad de la información en la plataforma. «Continuaremos usando Twitter, pero, eventualmente, si no proveen o no mantienen la necesaria certidumbre y seguridad sobre la información en la plataforma, hay muchas otras que se pueden tener en cuenta», ha subrayado.
Calviño ha comparecido este viernes junto a la vicepresidenta ejecutiva de la Comisión Europea, Margarethe Vestager, quien también ha mostrado su preocupación sobre los sucesos que envuelven la red social desde que se materializara su compra por el fundador de Tesla, Elon Musk. Vestager ha subrayado que se trata de un tema «muy complejo». Por su parte, el portavoz del Ejecutivo comunitario, Eric Mamer, señaló hoy que la Comisión sigue «atentamente» los acontecimientos y que está «reflexionando» sobre canales de comunicación política alternativos a Twitter.