El Supremo rebaja a seis años la pena a Sousa por quebrar Pescanova y exonera a la auditora
ECONOMÍA
Reduce todas las condenas, y el principal culpable podría evitar ir a prisión
16 feb 2023 . Actualizado a las 00:52 h.Satisfacción para los abogados de la defensa, decepción entre los letrados de la acusación. Así se puede resumir el impacto causado este miércoles por la sentencia del Tribunal Supremo que puso fin al recorrido judicial de la quiebra de Pescanova, ocurrida en el 2013, tras aflorar una deuda financiera de 3.600 millones de euros.
Diez años después del hundimiento del mayor grupo pesquero de España —rescatado por la banca acreedora, refundado como Nueva Pescanova y hoy bajo el control de Abanca—, el alto tribunal ha dado alivio a la veintena de acusados declarados culpables por el auto de octubre del 2020 de la Audiencia Nacional, al admitir todos los recursos y tener en consideración buena parte de ellos para aplicar generosas rebajas de condenas, comenzando por la del principal responsable de la quiebra, Manuel Fernández de Sousa.
La sentencia del Supremo rebaja de ocho a seis años la pena impuesta por la Audiencia Nacional, al absolver al expresidente de la compañía de los delitos de estafa agravada y falsedad en documento mercantil por los que fue condenado en la anterior instancia. Concluye el alto tribunal que toda esta arquitectura contable diseñada por Fernández de Sousa no buscaba «desatender sus obligaciones» —como ocurre con las estafas piramidales—, sino que «la imposibilidad de atender a sus deudas» fue causa de «circunstancias posteriores». Concretamente, de una venta frustrada de una nave de salmón en Perú y las millonarias pérdidas del negocio de la acuicultura. Además, el fallo también aplica una atenuante por dilaciones indebidas, aunque mantiene el resto de las condenas por delito continuado de falsedad en las cuentas anuales y falseamiento de la información económica y financiera.
Las penas suman, por una parte, cuatro años y seis meses de prisión y multa de diez meses por los delitos mencionados, manteniendo la cuota diaria de 50 euros; y un año y seis meses por un delito de alzamiento de bienes por el que también ha sido condenada a seis meses (medio año menos de la condena impuesta) su esposa, María del Rosario Andrade, como cooperadora necesaria.
Cómo evitar ir a prisión
El Supremo deberá remitir ahora a la Audiencia Nacional un auto para ejecutar la condena, y esta, a su vez, emitirá un requerimiento para la inmediata entrada en prisión de Fernández de Sousa, a quien le queda la posibilidad de solicitar recurso de amparo al Constitucional, una tramitación que no frenaría el encarcelamiento. Pero fuentes procesales explican que las rebajas de las condenas a 4,6 años y 1,6 años, respectivamente, sumado a condicionantes como la falta de antecedentes penales, la edad (cumplirá 72 años en marzo) o la salud, podrían evitar la entrada en prisión del expresidente de Pescanova, y permitir cumplir condena en reinserción social.
El fallo mantiene que Fernández de Sousa deberá indemnizar con más de 125 millones, solidariamente con la antigua Pescanova (Pescanova S.A.), a los inversores perjudicados. La empresa ha sido absuelta por el delito de estafa agravada por el que fue condenada en la primera instancia. Se mantiene, sin embargo, el delito de falseamiento de información económica y financiera, con la atenuante analógica de confesión, a la misma pena de dos años de multa (21.600 euros).
Los acusados Santiago Sañé Figueras, Manuel López Rodríguez y José Manuel Gil González, así como las empresas BDO Auditores, Quinta do Sobreiro, Kiwi España, quedan absueltos de los delitos por los que fueron condenados por la Audiencia Nacional.
Al respecto, la consultora BDO emitió este miércoles un comunicado en el que se congratuló de su absolución y de la de su socio, Santiago Sañé, por parte del Tribunal Supremo. «La auditoría en ningún caso está destinada a detectar fraudes como el ocurrido en Pescanova, que requieren de herramientas y técnicas forenses adecuadas», manifestó en su alegato.
El Supremo ha absuelto a la auditora BDO y a su aseguradora, Mapfre, al estimar que la supervisora de las cuentas tuvo una conducta descuidada, pero no con comportamiento doloso, como estimó la Audiencia Nacional.
Sin dinero para indemnizar
Falta ahora por saber cuándo van a cobrar los varios miles de inversores de aquella Pescanova que fue a la quiebra. Las cuentas bancarias en Portugal de Fernández de Sousa, por importe de 4,6 millones de euros, inicialmente congeladas por mandato judicial, serán embargadas para el pago de las responsabilidades del expresidente de la compañía gallega, pero no hay mucho más, porque Pescanova S.A. está en quiebra técnica y la absolución de condenados los exime de la responsabilidad civil. Abogados de la acusación avanzaron este miércoles que presentarán una batería de demandas de ejecución.