La estadounidense que iba a vigilar la competencia en la UE renuncia por la polémica creada

La Voz REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

Su nombramiento fue cuestionado por el presidente francés, Emmanuel Macron y los principales grupos en el Parlamento Europeo

19 jul 2023 . Actualizado a las 20:14 h.

La economista estadounidense Fiona Scott Morton, que en el pasado trabajó como consultora de grandes tecnológicas de su país, comunicó ayer a la Comisión Europea que renuncia al cargo de economista jefa en la Dirección General de Competencia para el que fue nombrada hace una semana. La dimisionaria explica su decisión por la «controversia política» que ha generado su nombramiento, cuestionado por el presidente francés, Emmanuel Macron, y los principales grupos en el Parlamento Europeo.

En su carta de renuncia, la estadounidense asegura sentirse honrada de haber sido seleccionada por Bruselas para un puesto de alta responsabilidad, pero que considera que lo mejor es que se retire del proceso y no ocupe el puesto.

El paso atrás de Scott Morton se produce un día después de que la comisaria Margrethe Vestager tuviera que rendir cuentas ante la comisión de Asuntos Económicos del Parlamento Europeo por elegir a una candidata que no tiene la nacionalidad de ninguno de los países de la UE (un requisito habitual para los altos puestos en la UE) y que en el pasado trabajó para empresas como Apple, Amazon o Microsoft, habitualmente en el punto de mira de los servicios comunitarios de competencia.

Los principales partidos en la Eurocámara pusieron en duda la idoneidad del fichaje por el posible conflicto de intereses de Scott Morton, ya que el cargo que debía ocupar en la Comisión Europea implica el examen del respeto de las reglas de competencia por parte de las grandes empresas tecnológicas y multinacionales estadounidenses con actividad en la UE.

También París había mostrado su malestar en los últimos días por la situación y el propio Macron, en declaraciones a la prensa el martes en Bruselas, se preguntó «si ninguno de los 27 [países de la UE] tiene académicos de calidad» como para tener que contratar a una candidata extracomunitaria. Pero hubo más voces en contra. Según AFP, hasta cinco comisarios —el español Josep Borrell, el francés Thierry Breton, la portuguesa Elisa Ferreira, el italiano Paolo Gentiloni y el luxemburgués Nicolas Schmit— escribieron a la presidenta Úrsula von der Leyen para exigir una reevaluación del nombramiento.