
Es la conclusión de una encuesta de préstamos bancarios publicada por el Banco de España
26 jul 2023 . Actualizado a las 05:00 h.Los bancos siguieron endureciendo en el segundo trimestre del año los criterios de concesión de préstamos, según refleja la encuesta de préstamos bancarios publicada este martes por el Banco de España. Son ya cinco trimestres consecutivos en los que las entidades financieras se muestran restrictivas a la hora de dar un crédito, tanto en los requisitos que exigen a particulares y empresas para desbloquearles la financiación como en los tipos de interés a los que los conceden, que no paran de subir.
Este endurecimiento responde al aumento de los riesgos que perciben las entidades financieras y a su menor tolerancia a estos, así como al incremento en los costes de financiación de los propios bancos y una menor disponibilidad de fondos. Por todo ello, el porcentaje de solicitudes de crédito rechazadas ha crecido en todas las modalidades.
Al tiempo que se endurece la concesión, también desciende la demanda de préstamos por segundo trimestre consecutivo. En España, ambas caídas han sido más moderadas que las registradas en el primer trimestre de este año. Sin embargo, en la zona euro, la demanda de préstamos se ha desplomado al mínimo histórico desde que el Banco Central Europeo empezó a realizar la encuesta, en el 2003. La disminución fue más fuerte de lo esperado por los bancos y se debe al aumento de los tipos de interés y a la caída de la inversión. Entre abril y junio, la demanda neta de préstamos de las empresas de la zona del euro se redujo considerablemente, con un desplome del 42 %, frente al descenso del 38 % del trimestre anterior.
Para el tercer trimestre, el informe apunta que se espera otro descenso en la demanda de préstamos de las empresas europeas, aunque no tan pronunciado.
Que haya menos créditos anticipa que habrá también menos actividad económica y menos crecimiento. La principal razón de que se pidan menos préstamos es que cada vez son más caros, por la subida de tipos de interés (que el BCE volverá a elevar en su reunión de mañana). En el caso de los particulares, otras razones son la menor confianza en el futuro, el mayor uso de los ahorros y las menores compras de vivienda, cuyo precio sigue creciendo.