La gallega EiDF reconoce una deuda de 157 millones, 90 de ellos, a corto plazo

Redacción LA VOZ

ECONOMÍA

CAPOTILLO

La empresa contrata a un despacho de abogados para analizar si denuncia a la auditora que halló evidencias de falsedad documental

01 sep 2023 . Actualizado a las 23:01 h.

La empresa gallega EiDF reconoce una deuda de 157 millones, de los cuales, 90 millones son a corto plazo, tras renegociar un aplazamiento con uno de sus acreedores, Iberian Fund, para traspasar 19,2 millones a largo plazo. La compañía ha emitido un comunicado para salir en defensa de su salud financiera. En él informa de que para despejar cualquier duda sobre su endeudamiento ha encargado un «mapa exhaustivo» actualizado y elaborado, conjuntamente con KPMG, que trabaja para el grupo como asesora para la implementación de las medidas necesarias para cumplir con lo exigido a las empresas cotizadas en el mercado continuo en materia de gobierno, gestión de riesgos y cumplimiento (GRC).

El prestigio de la empresa está tocado después de que la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) la suspendiera de cotización a mediados de abril por no presentar en plazo las cuentas del 2022. Estas fueron hechas públicas hace unas semanas y, junto a ellas, un informe forense (forensic) elaborado por Deloitte sobre las incidencias contables detectadas previamente por la auditora del grupo, PwC. En él recomienda un ajuste contable inferior a los dos millones de euros «debidos a la distinta consideración del grado de avance de algunas obras», según la compañía. Pero, además, Deloitte halló evidencias de posible falsedad documental. La empresa gallega ha encargado a un «despacho profesional de reconocido prestigio la elaboración de un dictamen legal derivado del informe forensic».

EiDF también aclara que no tiene previso vender más activos ni aplicar un ERE. De hecho, asegura que ha incrementado un 6 % la plantilla este año.

La CNMV ha levantado la suspensión de cotización de la empresa gallega, que el lunes pasado volvió al BME Growth. La acción cerró este viernes en 4,1 euros, un 7 % más que el día anterior. Sin embargo, acumula una rentabilidad anual negativa del 86 %.