Los antiguos becarios podrán recuperar hasta 5 años de cotización

Lucía Palacios MADRID / COLPISA

ECONOMÍA

XOÁN A. SOLER

El pago obligatorio de las cotizaciones no entra en vigor este mes de octubre, como así estaba previsto en la reforma de las pensiones, y se retrasa a enero

18 sep 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

Aunque así estaba recogido en la reforma de las pensiones, los becarios finalmente no comenzarán a cotizar de forma obligatoria a la Seguridad Social a partir de este mes de octubre. El Gobierno sucumbió a las presiones de las universidades, contrarias a esta medida así como al Estatuto del Becario que finalmente se ha quedado en el cajón, y retrasó el pago de las cuotas de todos los alumnos que realicen prácticas en las empresas u otros organismos hasta enero del 2024, sean remuneradas o no. Estas cotizaciones, no obstante, estarán bonificadas entre un 95 % y un 97 % por el Gobierno, con lo que las cuotas a pagar por los empresarios serán inferiores a los 10 euros al mes.

Los sindicatos cargaron contra este aplazamiento que «pone en riesgo» los derechos de los jóvenes y denunciaron el «inaceptable incumplimiento» de los compromisos adquiridos en el seno del diálogo social. Sin embargo, a cambio de esta cesión a las empresas y centros educativos, el ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá, accedió a ampliar de dos a cinco años los convenios especiales para poder computar como cotizados períodos de prácticas realizadas con anterioridad.

Esto significa que todas las personas que hayan sido becarios en algún momento de su vida y que no se les haya reconocido este período de cara a su vida laboral podrán rescatar hasta cinco años de cotización. Ya en el 2011 se generó este derecho de recuperar dos años de cotización para las personas con una beca remunerada y, desde el 2021, se extendió a todas las prácticas. Ahora, además, se amplía a cinco años e incluso para quienes ya hayan rescatado dos, pueden llegar a cotizar por siete años, lo que puede ser muy beneficioso para sus pensiones de jubilación y facilitarles retirarse antes.

Los investigadores, los más afectados

Para ello, tendrán que suscribir un convenio especial por el que pagarán probablemente una cuota bastante más reducida que la mínima y, además, se les permitirá abonarlo en un periodo más largo. Así sucedió en el 2011, que tenían que pagar el 50 % de la base mínima y en lugar de hacerlo en dos años les permitieron abonarlo en cuatro. Pero habrá que esperar a que el nuevo Gobierno desarrolle un reglamento con las nuevas condiciones. Carlos Bravo, secretario de Protección Social y Políticas Públicas en CC OO, pide al Ejecutivo que no espere y lo ponga en marcha inmediatamente. Según sus estimaciones, el colectivo más beneficiado será el de los investigadores, sobre todo los pertenecientes a la rama sanitaria o al Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), que acumulan muchos años como becarios. «Esta cotización a la Seguridad Social les puede ayudar a completar una carrera completa como contraprestación a haber retrasado su incorporación al mercado de trabajo para formarse», explica.

Bravo apunta a que el volumen de personas que han tenido que cotizar por este motivo se sitúa entre los 80.000 y 90.000 al mes y confía en que ahora se pase a varios cientos de miles.