Fedea denuncia que la jubilación activa no despega y pide crear un nuevo contrato laboral plenamente compatible con la pensión
12 feb 2024 . Actualizado a las 20:00 h.La jubilación activa en España no despega. Apenas 67.164 personas compatibilizan el cobro de una pensión con el empleo, de los que más de un 85 % son autónomos, según los últimos datos de la Seguridad Social, a 31 de julio del 2022. Es un porcentaje muy inferior al de países vecinos, donde tienen más desarrollada esta modalidad de retiro, y esta cifra, aunque se ha duplicado desde el 2016, es también inferior a la del año anterior.
La reducción se debe a que desde enero del 2022 para acceder a la demorada tiene que transcurrir un año desde la edad ordinaria de retiro, por lo que en ese ejercicio no se producen prácticamente nuevas altas, reconoce el ministerio.
Es por esto que Fedea carga contra la actual legislación, por no favorecer la permanencia de los mayores en el mercado de trabajo y no incentivar fórmulas de transición gradual, y pide «darle la vuelta como un calcetín» creando un nuevo contrato laboral que sea plenamente compatible con la pensión.
Así, propone reformar la legislación para que exista una sola modalidad de jubilación desde la primera edad posible de retiro anticipado (entre los 61 ó 63 años), en la que se permitiera hacer la pensión «plenamente compatible» con cualquier trabajo o renta con el objetivo de «no desaprovechar» el talento sénior.
Los mayores «molestan»
«España tiene una legislación pensando en que los trabajadores mayores molestan, que se vayan del mercado laboral y así dejen el espacio a una persona joven. Es la única forma de entender cómo tenemos esta legislación», denunció este lunes el investigador de Fedea Ignacio Conde Ruiz, calificando de «falacia» pensar que las horas de una economía son fijas y si las trabaja un mayor no lo hace un joven.
El objetivo de este nuevo contrato laboral que proponen es que el jubilado activo pueda seguir trabajando sin que existan topes máximos de retribución. A partir de la edad normal de jubilación —sin esperas, como ahora— la pensión sería plenamente compatible con cualquier salario o renta.
Puesto que este contrato se aplicaría a gente que tiene ya la seguridad de su pensión pública, Fedea defiende que debería tener un régimen extintivo especial, sin que haya costes indemnizatorios previos para la empresa contratante. De igual manera, también apuestan porque, tanto para la jubilación activa como para la demorada, el trabajador no debería cotizar una vez completada la carrera contributiva (en términos de edad y cotizaciones requeridas); o, como mucho, en la jubilación activa, que cotice a una tasa reducida.