
Aumentar la tasa de ahorro de los hogares, que llegó en marzo al 14,2 % de la renta disponible
09 jul 2024 . Actualizado a las 12:28 h.El Banco de España cree que la situación financiera de los hogares ha seguido mejorando por el dinamismo de la economía y la fortaleza del mercado de trabajo y calcula que un 26 % del saldo de hipotecas variables se abaratará entre 50 y 80 puntos básicos este año.
El informe de la situación financiera de los hogares y las empresas del primer semestre publicado este martes destaca que la situación económica actual, junto con una relativa atonía del consumo por parte de las familias, ha contribuido a aumentar la tasa de ahorro, que llegó en marzo al 14,2 % de la renta disponible.
Además, la revalorización de los activos ha seguido ayudando al aumento de la riqueza nominal, que ha ido acompañada de una reducción de la ratio de endeudamiento de los hogares hasta el 72 %, a pesar de que la carga financiera por intereses aumentó ligeramente en términos de la renta en el primer trimestre del 2024.
El efectivo y los depósitos a la vista continuaron perdiendo peso en la cartera de activos de los hogares españoles, a pesar de que la remuneración de los depósitos mejoró hasta el 2,6 % en mayo, 50 puntos básicos menos que la media europea, pero 253 puntos básicos más que a finales del 2021, cuando la remuneración era casi cero.
En cambio, las letras del Tesoro han perdido cierto atractivo tras la ligera caída de su tipo de interés, hasta el 3,4 % a un año en mayo, desde máximos del 3,9 % en octubre del 2023, apunta el Banco de España.
La financiación a hogares
En los últimos meses, aunque permanece en niveles elevados, el coste de la nueva financiación a los hogares se redujo ligeramente y, en el caso de las hipotecas, de forma más intensa, pues disminuyó unos 40 puntos básicos entre octubre del 2023 y mayo de 2024.
Esto contribuyó a que el nuevo crédito para la compra de vivienda siguiera aumentando, si bien el saldo de deuda siguió reduciéndose, a un ritmo cada vez menor, del 1,7 % en tasa interanual en mayo, por las elevadas amortizaciones, algo que no pasa en el resto de países.
Y en paralelo se mantuvo el dinamismo del crédito al consumo, que en mayo crecía un 7,2 % respecto al año anterior, lo que amplía las diferencias con el resto de Europa, donde avanza menos del 3 %.