El Tribunal de Cuentas Europeo pone en duda la contribución del fondo de recuperación a la transición ecológica
ECONOMÍA
Detecta que 34.500 millones de euros no se habrían dedicado realmente a inversiones de esa naturaleza
12 sep 2024 . Actualizado a las 08:32 h.«No está clara la contribución del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia (MRR) a la acción por el clima y la transición ecológica». Es la lapidaria conclusión a la que ha llegado el Tribunal de Cuentas Europeo tras pasar revista al fondo de recuperación de la UE, dotado de casi 800.000 millones de euros.
El 37% del volumen total de ese fondo debía movilizarse hacia proyectos «verdes». La Comisión Europea, en febrero de este año, aseguró que las ayudas orientadas en esa dirección ya superaban ese umbral, ascendiendo al 42,5% (275.000 millones de euros). Sin embargo, los auditores europeos señalan en el informe que han hecho público este miércoles que estas contribuciones «podrían estar sobreestimadas en al menos 34.500 millones de euros». Y señalan, además, otros problemas. Los expertos han detectado «insuficiencias» en los hitos y objetivos que tienen que cumplir los países en materia de clima para recibir el dinero. También en la notificación del gasto real y en el respeto al medio ambiente de algunos proyectos que se han catalogado como «ecológicos» y no lo son. El fondo «adolece de un alto nivel de aproximación en los planes correspondientes, así como de discrepancias entre la planificación y la práctica, y, en última instancia, proporciona pocas indicaciones de cuánto dinero se destina directamente a la transición ecológica», denuncia la responsable del informe, Joëlle Elvinger.
Además, se pone en duda el sistema de valoración. Tras estudiar multitud de casos, han detectado que la Comisión Europea sobreestima el impacto verde de los proyectos que se están llevando fondos para la transición ecológica. En algunos casos se detectan, directamente, irregularidades: «Un proyecto que enturbió las aguas literalmente fue una central hidroeléctrica de acumulación por bombeo (en Grecia) cuyo impacto medioambiental significativo no fue evaluado antes de financiar la planta», señala el Tribunal de Cuentas Europeo en un comunicado.
Los expertos tienen claro que Bruselas no dispone de la información suficiente para evaluar el rendimiento de las medidas que se están financiando con estos fondos y, por tanto, tampoco tiene en cuenta el nivel de gasto real que, como indica el documento, «se ve afectado por distintos factores, como los retrasos y la lenta absorción» en muchos países miembros. «La Comisión no puede garantizar la plena rendición de cuentas al respecto», advierten.