El desmantelamiento de la central térmica de As Pontes ya ha comenzado

Beatriz García Couce
Beatriz Couce REDACCIÓN

ECONOMÍA

El antiguo parque de carbones de la central ya está vacío de mineral
El antiguo parque de carbones de la central ya está vacío de mineral Endesa

La empresa vizcaína Lezama, contratada por Endesa, desarrolla labores de adecuación de las zonas de trabajo y el vaciado de distintos equipos

08 dic 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

El desmantelamiento de la central térmica de Endesa en As Pontes ya está en marcha. La empresa vizcaína Lezama, que ha sido adjudicataria de los trabajos, se ha implantado en el municipio para poder desarrollar un proyecto, el del desmontaje de la que fue una de las principales plantas energéticas abastecidas con carbón del país, que se prolongará durante los próximos cuatro años.

Las primeras actuaciones que se están llevando a cabo tienen carácter preparatorio. Así, se están realizando labores de adecuación de las distintas zonas de trabajo; el vallado de áreas para realizar las tareas con la mayor seguridad; el establecimiento de viales de obras y también la instalación de vestuarios y oficinas para el personal que trabajará en las distintas fases.

Lezama también acomete ya distintos trabajos en las torres de refrigeración de la central térmica, entre ellos la retirada de elementos internos. Además, actúa en el parque de carbones cubierto, en el que ya no queda mineral, y en el vaciado de distintos equipos.

El principal desafío a medio plazo —en los próximos seis meses— es lograr un avance notable en el desmantelamiento del parque de Saá. En concreto, se prevé que se haya alcanzado el 75 % del desmontaje. Además, el objetivo que se persigue es que en ese mismo período se hayan retirado los transformadores de potencia de los grupos generadores de la térmica y que se hayan vaciado por completo el interior de las torres 1 y 2 de refrigeración. Por otro lado, también se prevé finalizar el desmontaje de las rotopalas del parque de carbones cubierto. 

Línea de media tensión

Entre las actuaciones que ya han culminado sobresale el desmantelamiento de la línea de media tensión, de 20 kilovoltios, de Espiñaredo, mientras que se encuentran en la fase final la construcción de un nuevo colector de agua potable que atraviesa el municipio de As Pontes y se están desmantelando las antiguas casetas de medición de calidad ambiental que ya no tienen uso.

El proceso de desmontaje de la central de Endesa —con sus 1.400 megavatios de potencia llegó a ser una de las joyas de la corona del sistema eléctrico nacional— comenzó un año después de que se hubiesen apagado las instalaciones. El cierre de la térmica se enmarca en el proceso de descarbonización de los activos de Endesa y el cambio de modelo hacia una generación mayoritariamente renovable.

Entre las condiciones que estableció la compañía que dirige José Bogas en la licitación para adjudicar el desmantelamiento se encontraba el compromiso por el empleo local. Está previsto que, de media, trabajen alrededor de 180 empleados en las tareas que servirán para derribar todas las instalaciones que conforman el antiguo complejo energético.

En el inicio del otoño, Lezama comenzó el proceso de selección del personal, con el contacto con los antiguos trabajadores de compañías que prestaban todo tipo de obras y servicios para la térmica. Estaban inscritos en una bolsa de transición justa, algunos de los cuales ya se ocuparon durante varios meses de las tareas del predesmantelamiento de la central.

La compañía eléctrica invertirá alrededor de 50 millones de euros en el desmontaje y demolición de la planta.

El cierre de las instalaciones se produce de forma paralela al desarrollo del Plan Futur-e en el municipio, para compensar los efectos del fin de ciclo de las instalaciones. Además de atraer nuevos proyectos empresariales para la localidad, Endesa impulsa la construcción de cinco parques eólicos en el entorno de más de 50 megavatios de potencia, además de otros recintos de este tipo, con menor cuota, en otros emplazamientos.

Un proceso que busca dejar nuevo suelo industrial disponible para otras empresas 

«El objetivo del proyecto de desmantelamiento de la central térmica de carbón de As Pontes es dejar disponible, lo antes posible, nuevo suelo industrial de alto valor en la localidad para el asentamiento de iniciativas industriales que catalicen el desarrollo económico de la zona». Así se expresa el director general territorial de Endesa en el noroeste, Miguel Temboury. Constata, además, que «el interés de empresas en asentarse en los terrenos que ocupaba el complejo minero-energético de Endesa es elevado, por su localización estratégica, por la vocación industrial del concello y por contar en el entorno con abundantes recursos energéticos, como agua y viento, y sus proyectos renovables asociados».

Favorecer esa regeneración del tejido productivo en un enclave industrial de referencia para la comarca es uno de los pilares sobre los que se asienta el plan de acompañamiento socioeconómico de la eléctrica. En este sentido, Temboury subraya que la tramitación de alguno de estos nuevos proyectos ya se encuentra muy avanzada, como es el caso de la bioplanta de Ence para la fabricación de papel tisú.

Por otro lado, incide en el hecho de que, «el propio desmantelamiento generará durante los próximos cuatro años un empleo medio directo superior a 130 personas, que amortiguará los efectos de este cierre en la comarca». 

Un proceso complejo y en fases

El derribo de las centrales térmicas es un proceso complejo que, debido a su envergadura, implica riesgos, por los que Endesa exige que se implanten todas las medidas preventivas para garantizar la seguridad de los trabajadores. Voladuras controladas, tareas en altura y la convivencia con determinadas instalaciones que deben seguir funcionando hasta que se construyan otras —como la planta de agua desmineralizada que presta servicio al ciclo combinado de As Pontes o el laboratorio ubicado en el emplazamiento de la térmica y que da servicio a otras unidades del grupo—, elevan la dificultad. Para garantizar que todas las actuaciones previstas en la planificación se llevan a cabo con éxito y dentro de los plazos marcados, Endesa ha establecido que el desmantelamiento del antiguo gigante eléctrico con carbón fije distintas áreas de trabajo, en las que se podrá faenar de forma paralela, aunque cada una de ellas tendrá su propia secuencia de desmontaje.