La mayor generación con fuentes renovables acentuará las oscilaciones de precios de las tarifas variables, como la regulada, que vuelve a cambiar
11 ene 2025 . Actualizado a las 10:54 h.El mercado eléctrico español cerró el pasado año con un récord de generación de energía procedente de tecnologías renovables y habiendo alcanzado otras cifras hasta entonces inéditas, como los precios por debajo de los cero euros. Aunque en un sector tan sensible a un buen puñado de factores los cálculos a futuro suelen ser cautelosos, una tendencia que se da por segura en este 2025 es la acentuación de las diferencias entre los precios máximos y mínimos en las tarifas con discriminación por horas.
«La luz podrá costar diez veces más dependiendo de cuándo se consuma. Poner una lavadora al mediodía podría salir prácticamente gratis, pero hacerlo a las diez de la noche te podrá costar diez veces más», augura Jorge Morales de Labra, experto energético y director de la comercializadora Próxima Energía. Durante el año que acaba de terminar ya se produjeron oscilaciones acusadas. «El precio final para el consumidor doméstico es muy difícil que baje de los cinco céntimos por kilovatio a la hora, y que suba de los 20 o 25», subraya. Esta última, una cifra que multiplica por cinco la primera. Sin embargo, de Labra estima que durante este año, «en días extremos», esa variación puede duplicarse.
El experto energético sostiene que una gran parte de esa coyuntura vendrá motivada por el incremento de la aportación de la tecnología fotovoltaica a la cesta de producción eléctrica del país. «Claramente el 2025 va a ser el año en el cual la energía solar va a convertirse en la primera fuente de generación del país, una energía que hace 15 años era completamente residual, se ha convertido en la líder de la producción eléctrica. Ahondará aún más en las diferencias: los días nublados y de invierno tendremos precios altos, y en los de primavera y verano, se hundirán los precios en las horas solares», afirma.
Eso es así porque las plantas que utilizan los recursos naturales para funcionar, como el agua, el viento o el sol, tienen menos costes de producción que las restantes, y repercuten directamente en los precios en el mercado eléctrico. En este se fijan por horas, casando por cada una de ellas tanto las tecnologías que se van a usar como la demanda prevista. Cuando las renovables tienen capacidad suficiente para satisfacer todo el consumo previsto, en muchas ocasiones, esos precios se quedan a cero. Es lo que sucede, por ejemplo, durante la primavera con las horas centrales del día, por la gran aportación de las placas solares. Sin embargo, en los extremos de la jornada —por la mañana y por la noche—, cuando ni ese tipo de instalaciones ni otras renovables suelen funcionar, las tarifas alcanzan los picos máximos.
Seguirán las horas a cero
«Vamos a ver muchas horas en cero y por debajo de cero, y también bastantes horas por encima de cien. Veremos las dos cosas, precios muy altos y también muy bajos», afirma el director de Próxima Energía, en relación con las previsiones para el ejercicio que acaba de comenzar.
No obstante, después del encarecimiento mayúsculo de las facturas que vino derivado de la invasión de Ucrania por parte de Rusia, gran parte de los consumidores consultan las franjas horarias más económicas antes de utilizar los electrodomésticos o poner la calefacción. Como los que están acogidos a la tarifa regulada de la luz, el denominado precio voluntario para el pequeño consumidor (PVPC), que tienen contratada alrededor de 8,5 millones de clientes en el país. El PVPC se encuentra, desde el pasado año, en transformación, con el fin de reducir su volatilidad. El Gobierno central decidió reformar el sistema de cálculo de la tarifa, que hasta el 2023 estaba vinculada al mercado mayorista de la electricidad, para introducir en el cálculo referencias de los mercados a futuro, con previsiones de costes mensuales, trimestrales y anuales.
Así, el 1 de enero del 2024, el peso de la señal a futuro supuso el 25 % del total; mientras que desde el pasado 1 de enero, esa cuota se elevó hasta el 40 %. El primer día del 2026, cuando culminará la reforma, pasará a ser del 55 %.
No obstante, de acuerdo con las estadísticas más recientes de la Comisión Nacional del Mercado de la Competencia (CNMC) —la última actualización está fechada en el segundo trimestre del pasado año—, las modificaciones aplicadas en la tarifa regulada no han tenido un efecto negativo para sus clientes. Así, aunque tradicionalmente los cambios de comercializadora que efectúan los consumidores a la caza de las mejores ofertas se producen en el seno del mercado libre, también se registra alguna fuga del regulado al libre. Sin embargo, entre abril y junio del pasado ejercicio, la cifra de aquellos que optaron por esa opción —16.399 hogares— fue sustancialmente menor que los que lo hicieron el trimestre anterior, es decir, 21.480.
«Mucha gente que está en el regulado es cliente estático, que no pretende cambiarse o ni siquiera se lo plantea. Los mayores cambios se producen en el mercado libre», explica Alejandro Labanda, director de Transición Ecológica en la consultora beBartlet. Considera que el último incremento de la cuota de los mercados a futuro del PVPC protegerá a sus clientes de las subidas que se están registrando en el mercado eléctrico en momentos como en estos primeros días del año, con escaladas de precios debido al incremento del gas natural.
Un incremento del 29,3 % en el mercado eléctrico al inicio de este año
Durante los diez primeros días del 2024, el precio de la luz se quedó situado en una media de 73,24 euros por megavatio a la hora, según los datos publicados por el Operador del Mercado Ibérico de Energía (OMIE). Justo un año después, ese promedio escala hasta los 94,7. Es decir, se ha producido una variación interanual que implica un incremento del 29,3 % en el precio. Continuó así la tendencia registrada en el último mes del pasado año, cuando se batieron récords en las tarifas. En el arranque de este ejercicio, las variaciones más acusadas se produjeron durante los cuatro primeros días, en relación con las mismas jornadas del 2024. Así, del 1 al 4 se superaron los 100 euros por megavatio a la hora, con la punta máxima del día 2 en 134,02. Mientras, en el inicio del 2024 se registraron precios de entre 36,24 y 91,36 euros. Hoy quedará situado en 95,88, que refleja un leve descenso con respecto a la jornada del viernes, en la que superó los 100.