Díaz se enroca en subir 50 euros el salario mínimo, aunque se abre a negociarlo con la CEOE
ECONOMÍA

Los sindicatos presionan para elevarlo hasta los 1.200 euros y que Hacienda garantice que seguirá exento de tributar en el IRPF
15 ene 2025 . Actualizado a las 20:24 h.La vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, quiere protagonizar otro déjà vu. La primera gran medida que aprobó cuando aterrizó en el Ministerio de Trabajo, en enero del 2020, fue la firma de un acuerdo para subir 50 euros el salario mínimo interprofesional, con el plus de que el incremento estaba avalado por los propios empresarios. Así se hizo, y el SMI aumentó hasta los 950 euros. En aquel entonces se comprometió a que este «primer gran acuerdo social de la legislatura» marcaría «el inicio de una senda de diálogo con mayúsculas, codo con codo con todos los agentes sociales».
Cinco años después, Trabajo comenzó ayer otra nueva negociación con los sindicatos y la patronal, pero en un escenario muy diferente al de su estreno en la Moncloa, con unos empresarios en pie de guerra que rechazan otra subida si no se actualizan los contratos públicos y que descartan de plano posar en una foto junto a ella para escenificar un acuerdo. La escena del 2020 no se repetirá.
Pero Díaz aseguró ayer que lo intentará y se mostró confiada en que lo puede conseguir. «Creo que hay margen para el acuerdo. Lo creo sinceramente, siempre lo creo y vamos a trabajar por el acuerdo, sin lugar a dudas», aseguró. Es más, volvió a hacer uso de una frase que repite a modo de mantra: «Un acuerdo de diálogo social siempre es mejor, aunque las partes pierdan». Sin embargo, el margen de negociación es muy pequeño, prácticamente inexistente. De hecho, la decisión ya está tomada de antemano y este miércoles la puso sobre la mesa de los agentes sociales de forma oficial: el salario mínimo subirá 50 euros al mes, para situarlo en 1.184 euros en cada una de las catorce pagas anuales.

La vicepresidenta se decanta así por la franja alta de incremento recomendada por el comité de expertos para mantener el salario mínimo en el 60 % del salario medio neto y cumplir así lo establecido en la Carta Social Europea. Este grupo de catedráticos propuso una horquilla de subida de entre 39 y 50 euros al mes; es decir, un incremento de entre el 3,4 y el 4,4 %. Este sería el margen de maniobra que tiene el Gobierno, pero Díaz se enrocará en que el aumento debe ser 50 euros y, aunque tienda la mano a la patronal, no aceptará un alza menor, según reconocieron fuentes del ministerio. «El salario mínimo no es una cifra, es una política pública por excelencia para reducir la desigualdad. Mejora la vida de la gente y cambia vidas», defendió la vicepresidenta durante la rueda de prensa en la que presentó el informe de los expertos.
Aval de Economía
«Este incremento significa menos agobios, más oportunidades y algo importante: mayor dignidad. Subir el salario mínimo implica sacar a algunas personas de la pobreza. Estamos aquí para reducir la desigualdad. Ese es el reto de país. Y no vamos a parar», prometió la vicepresidenta segunda, que, en plena batalla con el ministro Carlos Cuerpo por la reducción de la jornada, quiso apropiarse de la «historia de éxito» de haber impulsado más de un 50 % el SMI, aunque el mayor salto de este salario de referencia se produjo antes de su llegada al ministerio, cuando el PSOE gobernaba en minoría tras la moción de censura. «Hace cinco años asumimos la responsabilidad de que ningún salario de este país fuera de miseria. No solo no hemos destruido España, sino que la hemos salvado desde lo público. Hoy la economía española va mejor», presumió sin embargo Díaz.
El Ministerio de Economía, en esta ocasión, no se opondrá al incremento de 50 euros, tal y como reconoció Cuerpo en una reciente entrevista. Pero la subida no convence a los sindicatos, que la ven insuficiente y pidieron elevarla hasta situar el SMI en el entorno de los 1.200 euros, porque la cantidad propuesta por Trabajo no garantiza, a su juicio, alcanzar el umbral 60 % del salario medio. Extraoficialmente, sin embargo, admiten que estarían dispuestos a avalar una subida inferior de 50 euros siempre y cuando Hacienda actualice el mínimo exento del IRPF para garantizar que el SMI se mantiene exento del pago de este impuesto. Por ello, exigen que este tema, que depende de otro ministerio, se clarifique antes de firmar un acuerdo.
La patronal no ha querido pronunciarse en este encuentro. La próxima reunión será el próximo miércoles, 22 de enero, y el Gobierno confía en cerrar ya la cuantía y con acuerdo.