El Gobierno tendrá que acceder a inyectar más dinero si quiere salvar el concierto de Muface
ECONOMÍA
Negocia «in extremis» con las aseguradoras, que exigen compensaciones por las pérdidas derivadas de la sanidad de los funcionarios
17 ene 2025 . Actualizado a las 19:46 h.El Gobierno no tendrá más remedio que poner más dinero encima de la mesa para resolver la crisis de Muface, que amenaza con dejar sin seguro sanitario a más de un millón de funcionarios y sus familias. Así lo aseguraron sindicatos y alguna de las compañías aseguradoras implicadas, que están inmersas en una negociación in extremis con el Ministerio de Función Pública.
El propio Óscar López reconoció que estaban «hablando» con las aseguradoras, pese a que la normativa les impide hacerlo cuando ya está abierto el concurso público y una de las opciones que hay es compensarlas por las pérdidas que sufran. López ofreció en la nueva licitación 1.000 millones más a Asisa, DKV y Adeslas para cubrir la sanidad de cerca de 1,6 millones de funcionarios y sus familias hasta el 2027. Pero «el mayor esfuerzo de la historia» —como calificó el ministro este desembolso— no ha sido suficiente para atraerlas, y Adeslas y DKV ya han comunicado su salida de Muface, dejando a más de 700.000 empleados públicos sin seguro.
Tras estos portazos, toda la presión se posó sobre Asisa, que a día de hoy da cobertura a 363.000 funcionarios, con la duda de si podrá asumir ella sola a más de un millón de pacientes adicionales. De hecho, por eso no se presentó a la primera licitación.
Fuentes de las negociaciones señalan que, pese al acercamiento de los últimos días, la tensión por parte de las aseguradoras se mantiene. «El Gobierno se juega mucho», apuntan, en referencia a su capacidad para mejorar las condiciones que ahora hay sobre la mesa. Sin embargo, tanto Adeslas como DKV son conscientes de la dificultad para llegar a un acuerdo. «La situación no es fácil. Sería un poco raro que, después de haber dicho que no, nos presentemos a la actual licitación a no ser que, además de la misma, el ministerio añada algún tipo de adenda en la que anuncie compensaciones», indican desde una de las firmas inmersas en la negociación.
DKV ya estimó unas pérdidas antes de impuestos de unos 70 millones bajo las condiciones de la nueva licitación, mientras que Adeslas cifró las suyas en algo más de 250 millones para ese período 2025-2027, prácticamente las mismas que las sufridas entre el 2022 y el 2024. El problema de aquellos años es que el convenio se redactó antes de la grave crisis inflacionista que, con su abrupta llegada, disparó los costes y desbarató los presupuestos de las aseguradoras.
«Hoy por hoy, siguen sin salirnos las cuentas y nuestra respuesta es la misma», precisan desde el sector, recordando que también será complicado que el Gobierno modifique la licitación con tan pocos días de plazo. «Si hay acuerdo, tendría que llegar ya después del 27 de enero», señalan.