El precio de la vivienda alcanza su máximo histórico, dejando atrás el techo del bum del ladrillo

Cristina Porteiro
C. Porteiro REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

ALBERTO LÓPEZ

Galicia es la segunda comunidad donde más se han acelerado las compras de inmuebles en el último trimestre del año

02 mar 2025 . Actualizado a las 13:08 h.

Se atribuye a George Santayana aquella acertada y conocida reflexión de que «quienes no pueden recordar el pasado, están condenados a repetirlo». Por eso resulta paradójico que casi 18 años después del pinchazo de la burbuja inmobiliaria (2007), la crisis del ladrillo —y las causas que llevaron a ella— se haya desdibujado en la memoria colectiva. Y eso que en muchos rincones de la geografía española todavía se mantienen en pie enormes esqueletos de cemento abandonados, herencia y recuerdo de aquellos años de excesos.

El dato es preocupante: el precio de la vivienda alcanzó a cierre del 2024 el umbral más alto de su historia. Nunca antes comprar un inmueble resultó tan caro. Ni siquiera durante la época de mayor apogeo de la especulación inmobiliaria. Según reveló este miércoles el Colegio de Registradores, el metro cuadrado en España ya se paga a una media de 2.164 euros. Esto es: el coste de un inmueble de 90 m2 asciende a casi 195.000 euros, con variaciones muy grandes entre comunidades. En Madrid, la más cara, el precio medio asciende a los 340.200 euros; en Extremadura, la más económica, no llega a los 75.000.

El índice de precios de vivienda de ventas repetidas (Ipvvr) en España acumula cinco trimestres consecutivos al alza, con un crecimiento del 1,7% entre octubre y diciembre del 2024. Esto ha hecho que se sitúe un 12,5% por encima del nivel máximo que había registrado en el año 2007.

La elevada demanda está detrás de este rali en los precios. Pero, ¿de qué se alimenta? Como apuntan los Registradores, la población sigue aumentado —con los flujos migratorios—, y de igual manera, también lo hace la formación de hogares —cada vez con menos miembros—. Además, el crecimiento económico continuado y el incremento de los ocupados y afiliados a la Seguridad Social han abierto las puertas del mercado inmobiliario a más ciudadanos. Sin olvidar, claro, la presión que ejercen los grandes y pequeños inversores extranjeros, responsables de casi el 15% del total de compras de vivienda en el cuarto trimestre del año pasado.

Fiebre en Galicia

España no es país para inquilinos, es un país en el que se sueña con ser propietario. Era así a principios de siglo y lo sigue siendo en la actualidad: el número de compraventas de inmuebles en el último tramo del 2024 alcanzó las 172.551. Los españoles no comprábamos tantas viviendas desde el tercer trimestre del 2007, hace 17 años.

Los gallegos van en cabeza. Son los segundos, por detrás de los riojanos, que más hambre tienen de ladrillo. Las compras (6.804) aumentaron un 13,4% en la comunidad respecto al trimestre previo —hasta un 18,3% más en el segmento de la vivienda nueva—.

¿Qué hay de los precios? Solo en Baleares, Comunidad Valenciana, Andalucía y Madrid crecieron más rápido que en Galicia.

Aunque siguen aumentando —los inmuebles estaban un 7,8% más caros en el cuarto trimestre del 2024 respecto al mismo período del año anterior— , Galicia es la séptima comunidad más asequible para buscar vivienda. Un piso de 90 m2 cuesta una media de 136.170 euros, con grandes diferencias entre comprar en una urbe como A Coruña a hacerlo en localidades más pequeñas y alejadas de la costa. Un ejemplo: adquirir una vivienda de 90 m2 en la ciudad herculina —undécima capital de provincia en España donde más se han encarecido los pisos— cuesta ya 220.000 euros de media, un 9,5% más que hace un año, pero si esta se compra en alguno de los municipios más económicos de la provincia, la factura baja a una media de 137.000 euros.

En Pontevedra, ya se paga un 8,1% más por el mismo inmueble (164.800 euros). Lo mismo en la de Lugo (+3,1%), donde hay que desembolsar más de 88.000 euros. Solo en Ourense se desinfla el mercado. Es una de las siete provincias españolas donde los precios retroceden; en su caso, un 2%. El metro cuadrado (974 euros) es el más barato de la comunidad.