Temen que la transferencia de competencias a las comunidades autónomas impida que se haga efectivo
17 mar 2014 . Actualizado a las 14:20 h.El secretario general de la Conferencia Episcopal Española (CEE), José María Gil Tamayo, ha pedido al Gobierno que cumpla su obligación de que la asignatura de Religión sea de oferta obligatoria en Bachillerato y que la transferencia de competencias a las comunidades autónomas «no lo impida».
«Me gustaría, sobre todo en Bachillerato, que el desarrollo de los decretos lleven esa exigencia de que sea contemplado el derecho de los padres a la educación de sus hijos o que los propios alumnos elijan -que es un alto porcentaje-, que sea realmente llevado a la práctica y las transferencias a las CCAA no impida esto», ha precisado este lunes durante un desayuno organizado por la COPE en el Palacio de Cibeles de Madrid.
Esta transferencia, según ha puntualizado, no solo lleva consigo «transferir un derecho sobre la educación» sino también «una obligación que ya contrajo el Estado con los acuerdos con la Iglesia católica y con los acuerdos con las confesiones».
Para Gil Tamayo, es necesario «por el bien de todos y de la calidad educativa», que la enseñanza empiece a ser «un terreno franco de injerencia política y de ideologización» y ha insistido en que la Iglesia no pide «privilegios» sino que se cumpla lo que establece la Constitución, que el Estado «facilite los medios» para que los padres puedan educar a sus hijos conforme a sus convicciones y se respeten los acuerdos internacionales.