C's y Podemos reclaman otro sistema de reparto electoral que no prime a los mayoritarios
11 abr 2019 . Actualizado a las 14:19 h.Ciudadanos, Podemos y Vox han planteado en la presente precampaña su exigencia de dotar a España de otro sistema de reparto electoral que no prime a los partidos mayoritarios y permita una distribución de escaños más proporcional a los votos recibidos por cada candidatura.
IU y BNG ya lo habían también, pero los pocos estudios que se han llegado a hacer en la Cámara baja en nada han variado el modo de reparto, ni siquiera a propuesta del Consejo de Estado, que en el 2009 advirtió que el actual sistema da una sobreprima a los partidos mayoritarios y multiplica exponencialmente el precio en votos a alcanzar a los minoritarios, los que por esta razón maldicen el método ideado por el jurista belga Víctor d’Hondt, mayoritario en todo caso entre los países desarrollados.
Ciudadanos defiende ahora la imposición, para poder entrar en el Congreso, de un filtro al nacionalismo mediante la exigencia a cada partido de un mínimo del 3% de los votos de todo el Estado, en lugar de que esa barrera sea exigida solo en cada provincia.
Podemos, como antes IU, en lugar de mover las barreras mínimas, como ya hizo Manuel Fraga en Galicia, quiere otro método que sea más proporcional que el d’Hondt. Y el Bloque, además de apuntarse también a que se adopte otro sistema, le gustaría que Galicia fuese una circunscripción única y poder sumar así todos sus votos a la hora del reparto.
Saint Laguë
Izquierda Unida clamó por la reforma electoral en el 2008 cuando con casi 970.000 votos logró solo dos diputados, mientras con cada 65.000 papeletas el PSOE y el PP iban incorporando un nuevo escaño. Podemos se ha sumado ahora a IU en plantear la formula Saint Laguë para corregir las disfunciones de la ley d’Hondt, dado que permite un mayor grado de proporcionalidad. De haberse adoptado dicho método en las anteriores elecciones generales, el PP habría tenido 15 escaños menos, el PSOE bajaría uno, Podemos y sus confluencias recibiría seis más, y la cuarta fuerza, Ciudadanos, sería la gran beneficiada con 12 diputados a mayores. PNV y CDC habrían perdido uno cada uno.
Método Hare
IU había ya defendido sin éxito hace cuatro legislaturas el mismo método, pero ampliando la Cámara de 350 a 400 escaños, con el fin de reducir la bolsa de votos inútiles que no se traducen en escaños, además de rebajar el peso del voto rural para que un escaño en Cuenca deje de costar 29.000 votos y en cambio en Madrid suba de media a 93.200.
El incremento de la dimensión de la Cámara baja en 50 escaños también fue sugerido por el Consejo de Estado, que además recomendó bajar de dos a uno el mínimo de escaños que puede elegir cada provincia y usar el modelo del cociente Hare, que establece el precio en votos de cada escaño en lugar de asignarlos por división de cocientes. IU habría obtenido en el 2008 trece escaños en lugar de dos. Y si se hubiera implantado en las generales pasadas el PP habría tenido 12 menos, el PSOE bajaría dos, saliendo más beneficiada la tercera fuerza, Podemos, que añadiría 6 a sus 71, y Ciudadanos también recogería ocho más. Y entre otros ajustes, los 39.000 votos de Pacma en Madrid le darían para estrenarse en las Cortes.
Pero aún hay más posibilidades de reparto, como el Cociente Droop, similar al anterior, con algunos matices contables que reducirían la pérdida de escaños respecto a la ley d’Hondt de la primera fuerza y rebajaría en especial el aumento de la cuarta.