Feijoo agita la agenda del PP

Juan María Capeáns Garrido
Juan Capeáns SANTIAGO

ELECCIONES 2020

XOAN CARLOS GIL

La propuesta de un pacto constitucionalista y su planteamiento para atraer a Cs destacan sobre los mensajes de Génova

23 nov 2019 . Actualizado a las 08:35 h.

La voz de Feijoo no es en sentido estricto la de la dirección del PP en España, pero desde el domingo electoral se ha elevado al menos al nivel de la cúpula del partido. Y es así por acción propia, con intervenciones recurrentes en medios nacionales desde hace una semana, y por omisión de Pablo Casado, que ha medido sus declaraciones desde el 10-N y solo ha hablado sobre actualidad política desde Croacia, donde los populares europeos celebran su congreso. Génova asume que el barón gallego tiene su propia línea de pensamiento y le da cancha para actuar de líbero en la medida en que no traspase determinados límites, a los que parece que se está ajustando el presidente de la Xunta, que no encuentra rechistes internos.

Ni el líder del partido ni dos de sus lugartenientes, García Egea y Maroto, se han esforzado demasiado por frenar la escalada de opiniones y sugerencias que Feijoo inició hace una semana, y hasta existe un alto grado de coincidencia en los planteamientos con José María Aznar o Cayetana Álvarez de Toledo, porque el Gobierno de concentración que ella propone y el pacto constitucionalista con el que Feijoo tienta al PSOE tienen la misma esencia.

Además, está opción es la preferida por la patronal y está calando en los medios de comunicación más influyentes. Casado, por su parte, solo puntualizó que el PP no iba a entrar en la subasta de la investidura, pero mantiene su disposición a explorar pactos de Estado en adelante para facilitar la gobernabilidad.

Sin embargo, el ímpetu que le está poniendo el dirigente gallego —«cada uno debe hacer lo que esté en su mano» para evitar el pacto con Podemos, llegó a decir— no está exento de cierto pesimismo. Ayer, en una entrevista matinal en la cadena Cope, pasó de tratar de seducir a los socialistas con el apoyo popular a criticar con crudeza a la actual dirección, incidiendo como a él le gusta en el halago a pesos pesados que ya no tienen mando en Ferraz. «La nave está en manos de insensatos», afirmó, para continuar diciendo que los que sí podrían entender la dimensión histórica de su propuesta o están fuera de juego —citó a González, Guerra, Leguina o Francisco Vázquez— o están en silencio «porque esperan un cargo» en el próximo Ejecutivo. El resto es «una aventura con malos compañeros de viaje», afirmó en referencia al intento de encontrar la estabilidad con los independentistas.

Una «fórmula» con Ciudadanos

A pesar de que hace casi un año y medio limitó todas sus aspiraciones políticas a Galicia, las iniciativas mediáticas de Feijoo están encontrando mayor eco si cabe por el silencio en el que está instalado el PSOE por la sentencia de los ERE en Andalucía y por el desmembramiento paulatino de Ciudadanos tras la salida de Albert Rivera.

Sobre la formación naranja también está haciendo valoraciones que no se escuchan en boca de otros líderes. Feijoo está convencido de que «Ciudadanos cabe dentro del PP» y de que hay puntos de «unión» intensos como para encontrar «fórmulas de entendimiento» a medio plazo, cuando la organización se recomponga en torno a Arrimadas.