El coordinador de Vox agredido en Pontevedra: «El ojo morado es para mí como una medalla»
ELECCIONES 2020
Vox y Abascal respondieron a la agresión de Juan Manuel Rosales en Twitter por un «tipo de ultraizquierdistas psicópatas que no pueden andar sueltos»
11 mar 2019 . Actualizado a las 05:00 h.La agresión que sufrió el coordinador de Vox de Pontevedra, Juan Manuel Rosales, el pasado sábado a manos del mismo joven que en el 2015 golpeó a Rajoy en la misma ciudad ha tenido respuesta en la cuenta de Twitter del partido. «Un ejemplo más de que la reinserción no siempre es posible. Exigimos que se aplique toda la Ley e ingrese cuanto antes en prisión para garantizar la seguridad de todos».
Con estas palabras, Vox también pone en duda la reinserción social, mientras que el líder de la formación, Santiago Abascal, también condenó la agresión de lo que denominó «tipo de ultraizquierdistas psicópatas que no pueden andar sueltos».
Ya bajando a la arena política de la contienda electoral, Abascal reprochó a Pablo Iglesias que actuase lanzando «la alerta violenta contra Vox». En la misma clave de crítica política se posicionó el agredido, Juan Manuel Rosales, que lamentó la actitud de la izquierda, en especial de Pablo Iglesias (sic) en la precampaña electoral, y señaló que ante el incidente «quiero suponer que los dirigentes nacionalistas estarán escandalizados» por lo ocurrido en Pontevedra. Este suceso también encontró la condena expresa del candidato a la alcaldía por el PP, Rafael Domínguez y del presidente provincial de los populares pontevedreses, Alfonso Rueda. Este último afirmó: «El respeto a uno mismo empieza por el respeto a los demás, por mucho que se discrepe. Los que agreden, se califican por sí mismos y no caben en democracia».
Por su parte, el agredido se manifestó este domingo todavía sorprendido por lo ocurrido, que ni entiende ni esperaba, ya que, según su versión, el ataque fue repentino. «Ni por mi imaginación pasó ni un momento que me pudieran agredir por repartir publicidad de un partido político», afirmó, quien no obstante ve algo positivo en la agresión: «El ojo morado es para mí como una medalla». Rosales indicó que el incidente lo protagonizaron dos jóvenes, si bien solo uno le golpeó. El primero se dedicó a descalificarlo, con gritos e insultos, mientras que el segundo, sin previo aviso, le empezó a dar golpes.
El dirigente pontevedrés de Vox apuntó que lo ocurrido le ha reafirmado en sus principios políticos. «Estoy fuerte anímicamente, bien y más convencido de defender las ideas y propuestas de Vox, y el ojo morado lo tengo como una medalla», insistió.
En opinión de Rosales, su atacante se comportó como si fuese un «boxeador» y él un saco al que golpear. Según su versión, el joven le dio al menos cuatro puñetazos y destacó que lo que más le impresionaba era la cara de su agresor, lleno de ira. Cuando el ataque cesó, Rosales pudo reunirse otra vez con el grupo de militantes del que se había separado para repartir folletos, aunque indicó que hasta en ese momento le estuvieron siguiendo y que llegó a encararse con estas personas, levantando la mano ensangrentada tras tocarse la cara, sin que ni con esas, según su relato, cambiasen las cosas. Por su parte, él interpuso una denuncia en la Comisaría de la Policía Nacional de Pontevedra, por lesiones. Añadió que los servicios jurídicos de su partido están analizando si se puede ampliar la denuncia contra el joven. El agresor también acudió a la Comisaría a confesar y el caso pasará ahora al Juzgado de guardia, que le notificará para tomarle declaración sobre lo sucedido el sábado.