El PP cae al nivel de hace 12 años en la antesala de las autonómicas

Domingos Sampedro
Domingos Sampedro SANTIAGO / LAVOZ

ELECCIONES 2020

Paco Rodríguez

El PSdeG amplía su presencia territorial y rebasa por primera vez el 30 % de voto en unas municipales

27 may 2019 . Actualizado a las 06:16 h.

Un año después de que Feijoo sucediera a Fraga al frente del partido, tuvo un tropezón en las urnas. Ocurrió en las municipales del 2007. El PP fue excluido de los gobiernos de las siete ciudades gallegas, pese a que en cuatro de ellas (Santiago, Ourense, Pontevedra y Vigo) conseguía ser la fuerza más votada. Anoche, los populares retrocedieron al nivel de hace doce años. Sigue siendo el partido hegemónico en Galicia y vuelven a cerrársele las puertas de las alcaldías de las siete ciudades, aparte de que desciende algo más de dos puntos en porcentaje de voto y pierde el 14 % de los gobiernos que tenía por mayoría absoluta.

Para el PPdeG llueve sobre mojado. Tras el revés que sufrieron en las municipales de hace cuatro años, que provocaron una crisis en el Gobierno gallego y el relevo al frente de la dirección general del partido, los populares encadenan un nuevo revés, que pone cuesta arriba la posibilidad de que dentro de algo más de un año puedan conservar el control de la Xunta con la cómoda mayoría que Feijoo tiene ahora.

El PPdeG carga con un porcentaje de voto del 33,4 %, el más bajo de su historia en unas municipales, aunque la parte positiva es que es once puntos superior a la media obtenida en España.

El PSdeG-PSOE, por su parte, se anota un éxito también sin precedentes. Por primera vez logra superar la barrera del 30 % del voto en unas municipales, pues se sitúa en el 32,9 %, subiendo de las 48 a las 66 alcaldías obtenidas por mayoría absoluta, pero que pueden rebasar con creces el centenar ?ahora tienen 94? mediante pactos.

Los socialistas están bien situados para tener alcaldes de su partido en seis de las siete ciudades gallegas, como ocurrió también en el 2007. Anoche, sin embargo, no lograron redondear el resultado, pues no fueron la fuerza más votada, marca que sí lograron en las generales del mes pasado en Galicia. El PSOE ganó las elecciones en todo el sur y el levante de España, pero Galicia, con la excepción de la provincia de Pontevedra, sigue teñida de color azul, lo que deja al PP con mucho aliento y con capacidad de poder reaccionar como lo hizo tras la derrota del 2007 en las ciudades, que le abrieron dos años después la Xunta.

Todo depende de lo que ocurra con los potenciales aliados del PSdeG. Por lo pronto, el BNG inició este 26M su recuperación electoral. Avanza casi un punto en apoyo y se sitúa en el 12,5 %. Es la primera vez que registra un ascenso en tres lustros y logra uno de sus objetivos: tener representatividad en todas las ciudades gallegas, al recuperar presencia en Vigo y Ourense.

Se ha dado el primer paso para arrancar la precampaña de las autonómicas del 2020.