Sigamos hablando de la consultora que se inventó Pablo, del alma fría de Soraya, de los nervios de Albert, de la noche aciaga de Pedro, de la ausencia de Mariano. Continuemos debatiendo del debate en que nada se debatió sobre Galicia. En eso de ahí fuera que llaman mundo real, entretanto, 9.000 familias, cada vez menos, dependen directamente de la leche. Los viejos no arreglaron los problemas del país del millón de vacas que casi fuimos. Y de los nuevos -la coalición En Marea, por ejemplo- sorprende que ni una línea acerca del sector hayan incorporado a su programa. Nuestros ganaderos no necesitan selfies de campaña, sí políticas de industrialización y diversificación, sí enterrar el minifundismo, sí protección con multas y sí acuerdos eficaces, no el chiste de septiembre. Hoy regresan los tractores a la calle y en la feria del 20D, con razón, se escuchará: «Amiguiños si, pero o votiño polo que vale».