Lo peor de la política

Tino Novoa EN LA FRONTERA

ELECCIONES 2016

02 jul 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Podemos ha acabado siendo, mal que le pese, el compendio de todos los vicios de la vieja política. Crecieron subidos a la ola del ansia de cambio y un discurso plagado de ilusión y esperanza. Como no basta con la indignación, porque el enfado solo no da de comer, dibujaron un horizonte idílico en el que cada uno podía encontrar un remedio propio para sus males y cualquier cosa era posible. A medida que sus opciones de poder aumentaban, sus propuestas se iban diluyendo y lo que antes era inviable acabó siendo puro humo. Nada nuevo bajo el sol, nada que otros no hayan hecho antes. Pero nadie había sucumbido tan rápidamente al puro electoralismo ni había sacrificado con tanta desfachatez sus principios en la pira del filibusterismo político. Que es lo que hizo Pablo Iglesias desde el minuto uno posterior al 20D. Su obsesión, no ya por sobrepasar al PSOE, sino por hundirlo, coadyuvó decisivamente a que hubiera nuevas elecciones. Y como su idolatrado Julio Anguita hizo en su día, ha acabado siendo el tonto útil del PP. Rajoy acabará agradeciéndole el favor.

Con todo, lo peor ha sido la reacción de los dirigentes de Podemos una vez descabalgados de la nube y constatado su fracaso. Primero fue la desorientación, impropia de unos expertos asesores internacionales, pero comprensible en quien es despertado de golpe de su sueño. Después, el intento de cuestionar la limpieza del proceso electoral, inundando las redes de sospechas de pucherazo. Unas insinuaciones inadmisibles que socavan la democracia. Lo mismo que el desprecio a los millones de españoles que han votado a otras opciones, especialmente al PP. Poner el ventilador para atribuir el mal resultado a que los españoles se han dejado llevar por el miedo y se han equivocado al votar es la forma más despreciable de eludir la autocrítica y la asunción de responsabilidades por los pobres resultados. Es no ya lo malo de la nueva o la vieja política, es lo peor de la política.