El hallazgo de la pieza radiactiva no evita la polémica en Gibraltar

La Voz EFE | MADRID

ESPAÑA

El artefacto fue encontrado en las instalaciones del astillero militar El Gobierno británico asegura que el objeto carece de valor comercial o de uso delictivo

17 ago 2002 . Actualizado a las 07:00 h.

La pieza radiactiva extraviada el pasado miércoles en la base naval de Gibraltar fue localizada ayer por militares británicos en el astillero de la instalación. Sin embargo, esto no logró evitar la polémica entre políticos, autoridades locales y ecologistas, que coinciden en exigir explicaciones y más seguridad. El artefacto, según informó el Ministerio de Defensa británico al Gobierno de Gibraltar, fue hallada tras una «rigurosa» investigación de los técnicos del centro, lo que supuso una revisión de todos los procedimientos de seguridad interna. El departamento británico insistió en que la pieza (un instrumento esférico de 5 centímetros que sirve para probar el grado de radiactividad en equipos y que posee un peligro tan bajo como una exposición solar, aseguran) no supuso «riesgo alguno», ya que su sello no había sido abierto ni manipulado. Y, matizó, «tampoco tenía valor comercial ni para ser usada con fines delictivos o ilegales». Pese a su supuesta inocuidad, las autoridades gibraltareñas exigieron más vigilancia para evitar que «puedan ocurrir este tipo de sucesos en el futuro» y solicitaron de los responsables militares una nueva investigación para aclarar lo sucedido. El presidente de la Mancomunidad del Campo de Gibraltar, Miguel Manella, aseguró que el extravío «perjudica seriamente los intereses» de la comarca, especialmente en temporada turística, ya que «es un hecho que implica a todo el Campo de Gibraltar, como ocurrió con el submarino Tireless», dijo. Cuidado medioambiental Desde el PP, su presidenta en Andalucía, Teófila Martínez, afirmó que los responsables del Peñón están «obligados a ser más cuidadosos y responsables con sus vecinos» en materia medioambiental. Martínez recordó cómo años atrás se vivieron conflictos en el entorno del Campo de Gibraltar, «cuando tuvimos que pelear por los vertidos que se hacían directamente al mar de todo tipo de basuras», y rememoró episodios como la criticada reparación del submarino «Tireless». También los grupos ecologistas se refirieron a este asunto, como Agaden, cuyo portavoz, Martín Caballero, dijo que esta pérdida demuestra que la base militar de Gibraltar es «una chapuza» y una instalación «insegura», que siempre genera problemas a los ciudadanos, por lo que reclamó su cierre. Una conquista en la que pidieron la implicación de Ana Palacio.