Imaz asegura que el PNV y el lendakari «irán de la mano» sobre la consulta popular

Joseba García BILBAO

ESPAÑA

17 jul 2007 . Actualizado a las 07:00 h.

El presidente del PNV, Josu Jon Imaz, salió triunfador en la polémica abierta con el lendakari por su negativa a aceptar la consulta popular propuesta por Juan José Ibarretxe si no va precedida de un amplio acuerdo y en ausencia de violencia. El lendakari, por boca de su portavoz, Miren Azcarate, admitió las condiciones que él mismo se impuso en el debate de investidura hace dos años, pero mostró su disposición a mantener la «iniciativa política» y a no quedarse «de brazos cruzados». Imaz consideró cerrada la polémica y señaló que su partido y el lendakari «irán de la mano» en torno a la consulta popular. Los presidentes del PNV y del Gobierno vasco intentaron cerrar la crisis abierta el pasado fin de semana tras el artículo en el que Imaz rechazó la consulta sobre el derecho a decidir de los vascos, que defiende Ibarretxe, mientras persista la violencia y no se parta de un consenso político amplio. Acuerdo del tripartito Al término del consejo del Gobierno vasco celebrado en Vitoria, la portavoz del Gabinete de Ibarretxe recordó que en su investidura como presidente autonómico, el lendakari explicitó los compromisos políticos del acuerdo del tripartito PNV-EA-EB, y señaló que si se alcanzaba un acuerdo para la normalización política y la convivencia solicitaría autorización del Parlamento vasco «para que en un escenario de ausencia de violencia y sin exclusiones, se realizase una consulta popular a la sociedad vasca que ratifique el acuerdo político alcanzado». Esta aclaración de Azkarate rectificó el anuncio formulado por Ibarretxe tras la ruptura del alto el fuego, en el que se comprometió a convocar una consulta sobre el derecho a decidir del pueblo vasco y en el que eludió cualquier referencia a la desaparición de ETA. Tras la reflexión pública de Imaz, con quien compartió el lunes la reunión de la ejecutiva nacionalista, el lendakari tuvo que rectificar ayer, aunque su portavoz aclaró que después del fin del alto el fuego «necesitamos iniciativa política hoy más que nunca», porque «no podemos caer en la desesperanza ni trasladar esa imagen a la sociedad».