El Gobierno no se reunirá con el Ejecutivo catalán antes del 9 de agosto para pactar la financiación
ESPAÑA
A menos de 48 horas de que expire el plazo fijado en el Estatuto de Cataluña para que el Estado y la Generalitat acuerden las bases del nuevo sistema de financiación autonómica, el Gobierno central no tiene previsto ningún contacto con el Ejecutivo catalán para tratar de cumplir ese compromiso. El vicepresidente Pedro Solbes ya expresó públicamente que no será posible pactar un nuevo modelo antes del 9 de agosto, pero la Generalitat y todos los partidos catalanes, excepto el PP, insisten en que se cumpla lo que establece el Estatut. Si como parece probable el Gobierno no mueve ficha antes del sábado, los miembros del tripartito -PSC, ERC e Iniciativa- y CiU celebrarán ese día un acto conjunto de reivindicación.
De manera no oficial, desde el Gobierno se afirma que el documento presentado por Solbes con las bases del nuevo sistema de financiación para todas las comunidades cumple con lo que exige el Estatuto catalán. Por ello, el Gobierno no tiene previsto reunir la Comisión Mixta Estado-Generalitat hasta septiembre.
La Generalitat ha conseguido el respaldo absoluto de CiU en esta negociación, hasta el punto de que el secretario general adjunto de CDC, Felip Puig, descartó ayer, en contra de lo que había anunciado inicialmente, que la coalición presente su propia propuesta de financiación después del 9 de agosto si el Gobierno incumple el plazo. Los nacionalistas tratarán ahora de pactar una propuesta conjunta con la Generalitat para presentarla a finales de agosto o principios de septiembre. El objetivo, dijo Puig, es «la unidad de acción».
Para reforzar esa unidad, el Gobierno catalán trata de sumar al PP a sus reivindicaciones, por lo que el consejero de Economía, Antoni Castells, mantendrá el próximo lunes una reunión con la nueva secretaria general del PP, Alicia Sánchez-Camacho. La dirigente popular aseguró ayer que su partido desea «una posición conjunta de todos los partidos catalanes en cuanto a financiación y que no haya uniones estratégicas para otras cuestiones». Pero añadió que la financiación y los asuntos económicos son la «principal preocupación de los catalanes», y de ahí la necesidad de que los partidos de Cataluña acuerden «una posición conjunta al margen del Estatut».