La banda armada considera al socialista un «caudillo» y critica al PNV por ser «el máximo responsable del resurgir del españolismo».
12 abr 2009 . Actualizado a las 12:06 h.En un comunicado remitido este sábado a Gara, ETA señala al Gobierno de Patxi López como «objetivo prioritario» y rechaza poner fin a la lucha armada «mientras no se alce un muro que detenga la represión». La banda terrorista tilda a Patxi López de «caudillo» y manifiesta que «no reconoce ninguna legitimidad democrática al nuevo Gobierno de Gasteiz que formará». «Al igual que advertimos de que el Gobierno de Ibarretxe sería el gobierno del fraude para cualquier abertzale, ahora queremos afirmar que el de López será el gobierno del fascismo y de la vulneración de derechos. En la medida en que no haya un cambio de actitud, los responsables políticos de esa estructura impuesta serán objetivo prioritario de ETA», asegura en su declaración emitida ante la jornada de Aberri Aguna.
El comunicado no es menos crítico con el PNV, dado que le imputa «ser el máximo responsable del resurgir del españolismo» al haber admitido la estrategia represiva estatal, con la ilegalización de la izquierda abertzale como último exponente. «Ahora llegan las lamentaciones, ahora hay que oír de su boca que se ha producido un golpe institucional», asegura en su declaración de ocho puntos en la que ETA fija su posición y destaca la afirmación de que «el Movimiento de Liberación Nacional Vasco está dispuesto a consensuar con las fuerzas democráticas de Euskal Herria un compromiso y una estrategia única para el cambio político y para la solución democrática al conflicto».
Respecto a Aralar, ETA anticipa que «la izquierda abertzale será castigada con dureza por el enemigo por su compromiso y su lucha, pero Aralar será castigada en la historia de este pueblo con adjetivos amargos». Y celebra, por contra, los 100.000 votos anulados. «Los de la lucha y la dignidad, que no dudamos de que serán los cimientos más valiosos para la libertad de Euskal Herria», asegura la banda.
El texto matiza que el cambio político debe derivar un marco democrático que incluya la autodeterminación y que permita materializar todos los proyectos. También advierte de que «mientras no se pase de los discursos a los hechos en los pasos para levantar un muro que detenga la represión y los ataques de los estados y para llevar a este pueblo a un escenario de autodeterminación, que nadie le pida a ETA que renuncie a la lucha con las armas para hacer frente al enemigo».
En la misma línea, insiste en que «mientras los derechos nacionales de Euskal Herria estén vulnerados y oprimidos, mientras se desarrolle la imposición de los estados contra su ciudadanía mediante armas y violencia, ETA reafirma el compromiso de seguir golpeando a los enemigos de Euskal Herria y a sus intereses».