El aspirante socialista a la Moncloa reivindica a un PSOE en horas bajas y defiende su plan para salir de la crisis frente al de un PP que propone «que a quien Dios se la dé San Pedro se la bendiga». Por M. Cheda
06 nov 2011 . Actualizado a las 17:06 h.Tras el baño de masas que ayer se dio en Dos Hermanas (Sevilla), esta mañana el aspirante socialista a la Moncloa también ha logrado llenar hasta la bandera el pabellón municipal Fuente de San Luis, en Valencia, cuyo aforo la organización cifra en más de diez mil personas. En territorio popular, a Alfredo Pérez Rubalcaba lo han precedido sobre el escenario la candidata al Congreso Inmaculada Rodríguez Piñero; el secretario general del PSOE en la comunidad, Jorge Alarte; y, por segunda jornada consecutiva, el exjefe del Ejecutivo central Felipe González.
Justo antes de arrancar el mitin, fuera llovía mientras dentro jarreaban gritos de «Rubalcaba, Rubalcaba», «a por ellos, a por ellos» y «presidente, presidente». Entre el público VIP figuraban la antigua ministra de Cultura Carmen Alborch y la todavía titular de Sanidad, Leire Pajín. Hasta en tres ocasiones, si bien brevemente, el acto se ha visto interrumpido por acciones de protesta promovidas desde el graderío: dos por pequeños grupos de indignados y otra por cuatro defensores de un Sahara libre.
Consciente de que no corren buenos tiempos demoscópicos para andar por ahí presumiendo de voto socialista, desde la tribuna, Rubalcaba ha pedido, casi implorado, a los suyos: «No esperéis a que la gente que está en casa venga a nosotros, que no va a venir; vayamos a ellos. [...] Dad la cara, ya veréis cómo cambian las encuestas». «Explicad a la gente -ha abundado- lo que hemos hecho bien, lo que no nos gusta de lo que hemos hecho y lo que vamos a hacer. [...] Hablad con ellos y decidles que somos los socialistas de siempre».
Además, se ha esforzado en contraponer sus planes de futuro con los de Mariano Rajoy. «No somos lo mismo, la derecha y la izquierda, nunca. No tenemos las mismas políticas», ha sentenciado antes de apostillar, muy refranero él: «Hay dos formas de salir de la crisis: salir con todos sin dejar a nadie atrás y otra que consiste en que a quien Dios se la dé San Pedro se la bendiga. Nosotros pedimos el voto para la primera».
Por su parte, González ha respondido a las críticas vertidas en las últimas horas desde el PP a propósito de su aparición en escena esta campaña. «Rajoy tiene aire de casino del siglo XIX jugando la partida. Cuando lo veía ayer pensaba: ¡No puede ser que esto sea el futuro y yo el pasado!», ha ironizado. Además, en lo que constituye una especie de enmienda al programa electoral de su propio partido, ha propuesto «ir un paso más allá de la dación en pago» y facilitar, mediante mecanismos de demora en las cuotas acordadas, el sostenimiento de hipotecas firmadas por propietarios en apuros para responder.