José Tomás recordó en el juicio que él y su equipo tuvieron que trabajar muy duro para atender los pedidos de Francisco Camps y de Ricardo Costa por sus características físicas y peticiones especiales, que, sobre todo en el caso del primero conllevaron incluso «un trabajo de chinos». Tomas señaló que tanto en el caso de Camps como en el de Costa se hizo un patrón especial. «Estoy seguro de que Emilio Latorre [patronista de Sastgor, empresa que confeccionaban los encargos] todavía recuerda las características de estos señores, porque hubo que hacer varias cosas, copiar la trabilla del ceñidor de Puebla [sastre de Costa] y traerla de Italia; tuvimos que hilar muy fino», explicó en la vista.
A Camps lo calificó como una una persona austera. «Me dijo que solo quería un traje, pero Álvaro Pérez llevó los muestrarios a su mujer para que viese los tejidos y al final fueron cuatro». El expresidente, según este testigo, «podría llevar trajes de confección porque tiene buen tipo». Recordó sus medidas y el trabajo adicional que supuso atender sus preferencias. «Al final nos tuvo que dejar un traje con el que se sintiese cómodo, lo desmontamos por completo para copiarlo. Fue un trabajo de chinos, pero se hizo», recordó en la vista.
«Yo tomé medidas a Camps en noviembre del 2005 por primera vez y jamás ha consentido que nadie le hiciera nada sin estar yo presente», relató el sastre, que explicó que uno de los primeros encargos del expresidente correspondió a tres americanas «muy marcadas» que en principio no se «atrevió» a ponerse. Álvaro Pérez, el Bigotes y el propio Tomás lo convencieron de que estaban de moda. «Se las entallamos y luego me llamó por teléfono para decirme que se las había puesto y que había sido un éxito», explicó durante su larga intervención. En total, Francisco Camps se confeccionó tres americanas y cuatro trajes en Milano, según el testimonio de Tomás.
También afirmó que las prendas ya terminadas se le enviaron alguna vez a Francisco Camps, pero que algunas fueron devueltas porque no lo sabía su personal de seguridad y se optó por mandarlas al Bigotes: «Estoy seguro de que Sastgor también tiene la dirección de Pérez en Valencia».