Cree que hay pruebas suficientes, pero la decisión la tomará Torres-Dulce
02 may 2012 . Actualizado a las 07:00 h.«Hay caso, existen pruebas, constan en la causa documentos de sobra y hay testigos dispuestos a declarar que los dos socios estaban al tanto de todo. Hay materia más que suficiente para sentar en el banquillo a Iñaki Urdangarin y a Diego Torres; conseguir una condena por malversación, fraude a la Administración, falsedad documental y evasión fiscal; y lograr una multa millonaria muy por encima de la que ofrecen ¿Por qué aceptar un acuerdo que los libraría de la cárcel y que les supondría un desembolso menor cuando sabemos que lo tenemos todo para ganar en un juicio».
Habla uno de los responsables de la Fiscalía Anticorrupción, todavía sorprendido de que se haya filtrado el «ofrecimiento informal» del duque de Palma para llegar a un acuerdo de conformidad con la acusación pública. O sea, un pacto para librar al yerno del rey de la cárcel, que consistiría en que él y Torres admitirían su responsabilidad penal por el saqueo de fondos de cerca de 16 millones de euros procedentes de instituciones públicas y privadas; devolverían, entre los dos, entre 3,5 y 4 millones de ese dinero; y, a cambio, el ministerio público acusaría a ambos de penas menores a los dos años de cárcel lo que, de hecho, les evitaría pisar la prisión porque ni el exdeportista ni su exsocio tienen antecedentes penales.
El acuerdo, además de sortear el ingreso en prisión a los dos exdirectivos del Instituto Nóos, ahorraría al marido de la infanta Cristina el incómodo trámite de una largo juicio, bajo el permanente foco de la prensa. Hasta ahí el ofrecimiento que Urdangarin y su socio han hecho llegar, por vías no jurídicas, a la Fiscalía. Una propuesta de trato que a los dos fiscales del caso Palma Arena, Pedro Horrach y Miguel Ángel Subiran, ha provocado cierta indignación, aunque la última palabra la tendrá el fiscal general del Estado, Eduardo Torres-Dulce. El será quien decida si la acusación pública suaviza las acusaciones contra el yerno del rey para que evite la cárcel.
Petición informal
Por lo pronto, responsables de la Fiscalía balear apuntan que ni aún se han sentado a valorar la propuesta y que sobre la mesa de los dos fiscales únicamente hay una petición informal de los abogados de Urdangarin para analizar la posibilidad de un pacto, que ni siquiera ha sido aceptada.
Antes que nada, Anticorrupción quiere esperar a conocer la versión de Torres, quien hasta hace una semana amenazaba con tirar de la manta. De hecho, su defensa había exhibido hace solo unos días tres comprometedores correos electrónicos que implicaban al rey en los negocios de su yerno a modo de aviso a navegantes. Torres, no obstante, no ve con malos ojos el acuerdo que intenta Urdangarin y está dispuesto a sumarse a él, compartiendo los gastos, y firmando una tregua temporal, a la vista de que los ataques del uno al otro (y viceversa) no hacen más que empeorar la situación procesal de ambos.