El lider del PSOE ha evitado hacer declaraciones a los medios sobre la derrota en las elecciones en Galicia y Euskadi
23 oct 2012 . Actualizado a las 18:01 h.El secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha evitado hoy hacer declaraciones a los medios sobre la derrota en Galicia y Euskadi del domingo y sobre las voces internas que piden su dimisión, en una jornada en la que numerosos diputados socialistas han dado la cara para avalar su liderazgo.
Rubalcaba ha acudido hoy al pleno del Congreso en el que ha comenzado el debate de las enmiendas a la totalidad a los Presupuestos Generales del Estado para el 2013, pero ni a la llegada ni a la salida de la sesión matutina ha querido responder a las numerosas preguntas de los medios de comunicación.
Esta tarde, será él quien suba a la tribuna del hemiciclo para defender la posición del grupo socialista y pedir la devolución al Gobierno del proyecto de cuentas del Estado, una intervención que comenzó a preparar ayer lunes. De hecho, por esa razón no compareció ayer en la rueda de prensa posterior a la reunión de la Comisión Permanente de la Ejecutiva Federal y lo hizo la vicesecretaria general, Elena Valenciano. Por eso, hoy había una gran expectación mediática ante su presencia en el Congreso, pero ha preferido seguir guardando silencio y no hacer ningún tipo de comentario.
Sin embargo, varios diputados socialistas han querido explicitar públicamente su apoyo a Rubalcaba, entre ellos el histórico dirigente vasco José María Benegas, en cuya opinión «seguro que no» es éste el momento de plantearse un cambio de liderazgo. «Tenemos a un líder, que es el secretario general que ha sido elegido en un congreso hace ocho meses», ha argumentado Benegas. De la misma opinión ha sido el ex secretario de Estado para la UE Diego López Garrido, quien ha descartado que en el PSOE haya un problema de liderazgo.
A su juicio, lo que tienen que hacer los socialistas es «reflexionar a fondo sobre lo que ha sucedido». «Primero la reflexión y después de todo, las personas», ha insistido, convencido de que sería «muy temerario» adoptar decisiones apresuradas. López Garrido ha restado importancia a las voces internas que cuestionan el liderazgo de Rubalcaba y ha dejado claro que en el PSOE hay «mucha gente» y quién lo dirige «no es una cosa que se pueda decidir por tres o cuatro personas».
Para el secretario de Formación del PSOE, Rafael Simancas, su partido tiene «un líder sólido», que fue elegido hace pocos meses. «Y tenemos plena confianza en él», ha recalcado. Simancas ha recordado que los socialistas harán cambios en el funcionamiento del partido y renovará su oferta programática, «pero con una dirección sólida y consolidada y en torno a Alfredo Pérez Rubalcaba». El responsable federal de ideas y Programas del PSOE, Jesús Caldera, ha considerado que su partido «obviamente no» tiene un problema de liderazgo, mientras que el secretario de Ciudades y Política Municipal, Gaspar Zarrías, se ha limitado a reconocer que hay «muchos, muchos problemas» en el partido.