Dos meses después de lanzarse la operación Emperador siguen aflorando fondos producto del supuesto blanqueo de dinero ejecutado por la trama de origen chino dirigida por Gao Ping. La Policía Nacional anunció ayer que bloqueó 11 millones depositados en cuentas a nombre de varios de los imputados en la causa que instruye el juez Fernando Andreu. Esta cantidad viene a sumarse a los 11,6 millones que ya habían sido decomisados en efectivo, por lo que la suma total ya supera los 22 millones. Los investigadores calculan que la organización disponía de capacidad para evadir a China entre cuatro y cinco millones mensuales.
Para asestar este nuevo golpe, los especialistas económicos analizaron durante dos meses cerca de 3.000 cuentas abiertas en un centenar de bancos y detectaron que mil eran usadas por la red para depositar el dinero obtenido fruto de sus actividades ilegales como la prostitución, la inmigración ilegal y la extorsión.