El juez le ha instado a entregar todos los dispositivos a través de los cuales pueda enviar o recibir correos electrónicos
14 dic 2012 . Actualizado a las 17:46 h.El titular del Juzgado de Instrucción número 2 de Pamplona ha decidido imputar al exdiputado Santiago Cervera por el supuesto intento de chantaje al presidente de Caja Navarra en el que se vio implicado y le ha instado a entregar todos sus ordenadores, móviles y tabletas.
Cervera, ha informado el Tribunal Superior de Justicia de Navarra, deberá entregar el próximo día 21 a mediodía en el juzgado cuantos ordenadores, móviles, tabletas o dispositivos informáticos disponga que permitan la remisión y recepción de correos electrónicos.
Asimismo, el juez ha acordado solicitar a la operadora One&One que en el plazo de cinco días entregue todos los datos, del 1 al 13 de diciembre, relativos a la cuenta de correo electrónico desde la que se supuestamente se envió un mensaje amenazante al presidente de Caja Navarra, José Antonio Asiáin. Cervera fue detenido por la Guardia Civil el pasado domingo al ir a recoger el sobre con la citada cantidad de dinero en efectivo, aunque el exdiputado ha explicado que él también fue objeto de «una trampa», ya que creía que el sobre contenía documentación, al haber recibido el 29 de noviembre otro correo electrónico en el que se le ofrecía información confidencial sobre Caja Navarra. El magistrado también encarga a la Guardia Civil que revise las cámaras de tráfico o seguridad del Ayuntamiento de Pamplona del entorno donde fue detenido Cervera, así como de las colocadas por los agentes que participaron en el operativo. También solicita la declaración testifical de estos agentes para que aclaren si observaron a Cervera o a otras personas acercarse al lugar de entrega del sobre (una rendija de un muro del fortín de San Bartolomé) en las horas o días previos a la detención y expongan cuál fue la actitud del exdiputado en el momento de su arresto.
Por último, se solicita a la Delegación del Gobierno en Navarra que informe sobre si Cervera disponía de servicio de protección cuando se desplazaba a Pamplona.