El dispositivo de seguridad es mayor que anteriores convocatorias porque el ministerio no descarta la participación de grupos radicales
23 abr 2013 . Actualizado a las 23:05 h.Alrededor de 1.400 agentes de la Unidad de Intervención Policial (UIP), los antidisturbios, se desplegarán en el centro de Madrid con motivo de la convocatoria de protesta que llama este jueves a «asediar» el Congreso de los Diputados, un dispositivo de seguridad mayor que en otras ocasiones.
El dispositivo estará integrado por 28 grupos completos de UIP, compuestos por 50 agentes cada uno, de los que Madrid aportará 17. El resto de grupos, 11, procede de otros puntos de España, en concreto, de Barcelona, Valencia, Sevilla, Valladolid, A Coruña y Málaga.
Un operativo de seguridad que será superior al diseñado en otras protestas de la plataforma del 25S, uno de los colectivos que participa en el escrache al Congreso, como la celebrada en septiembre del pasado año en el que los efectivos sumaron 1.300, el mismo número de agentes que también se desplegaron en la capital con motivo de la huelga general el 14 de noviembre.
Las fuentes consultadas advierten de que en esta convocatoria, que ha partido de la Plataforma ¡En Pie! y que apoya la coordinadora 25S, llama a «asediar» la Cámara baja hasta conseguir que se disuelvan las Cortes Generales, podrían participar grupos radicales con el ánimo de reventar la protesta. Preocupa, apuntan las fuentes, la llegada a Madrid de radicales procedentes de otros puntos de España, como Barcelona, Asturias o Castilla y León, que se unirán a los más violentos de la capital.
Sin embargo, desde la web de la plataforma, los convocantes explican que en la protesta del 25A confluyen «varias sensibilidades» y que no están divididos «en buenos y malos, en pacíficos o no pacíficos». «Todos partimos del carácter pacífico del movimiento popular.Todos reivindicamos el derecho a la legítima defensa», añaden en la web, donde subrayan que la finalidad de la convocatoria es la puesta en marcha de un proceso constituyente a partir del cual la mayoría pueda decidir sobre el modelo político, económico y social».