Las autonomías que no reformen su administración perderán ayudas, advierte Hacienda

Madrid / Europa Press

ESPAÑA

Insiste en que el Estado dispone de su capacidad de decisión sobre los planes de las comunidades y ayuntamientos para hacer que apliquen la reforma

06 ago 2013 . Actualizado a las 09:28 h.

El secretario de Estado de Administraciones Públicas, Antonio Beteta, advierte a comunidades autónomas y ayuntamientos de que tendrán que asumir los principios de la reforma de las Administraciones si quieren acogerse a los mecanismos de ayuda que ofrece el Estado, como pueden ser el Fondo de Liquidez Autonómica (FLA) o los planes de pago a proveedores.

Tras admitir que las medidas propuestas en la reforma de las Administraciones aprobadas el mes pasado por el Gobierno son recomendaciones, ya que el Ejecutivo no puede intervenir en las competencias autonómicas o municipales, Beteta afirma, en una entrevista a Europa Press, que el Estado dispone de su capacidad de decisión sobre los planes económico-financieros de las comunidades y ayuntamientos para hacer que estos apliquen la reforma. «Si no te apruebo el plan económico-financiero, no entras en el mecanismo de financiación, no entras en el FLA y no podrás acogerte a los programas de proveedores, y en consecuencia, si esto no se produce, ni comunidades autónomas ni ayuntamientos acomodarán sus niveles de gasto e incumplirán la ley de morosidad e incurrirán en las restricciones que se derivan de la ley de estabilidad presupuestaria», explica.

Obligadas

Ante las críticas de la Generalitat de Cataluña y el Gobierno vasco contra esta reforma, que ya han adelantado que no van a aplicar, Beteta les advierte de que se les puede obligar a ello porque «para eso está el Tribunal Constitucional» y el Consejo de Estado ha determinado que las bases de régimen local «corresponden a las Cortes», por lo que «las administraciones autonómicas han de acomodarse a lo dispuesto en la normativa básica». En cuanto al rechazo que desde el principio ha manifestado el PSOE, Beteta asegura que el Gobierno «siempre ha intentado, con lealtad, conseguir el acuerdo» con el principal partido de la oposición, que gobierna en ayuntamientos importantes y diputaciones.