Rajoy dará su apoyo hoy a Samaras en Atenas, mientras Pablo Iglesias participará en un mitin de Syriza el día 22 y Sánchez queda descolocado
14 ene 2015 . Actualizado a las 05:00 h.Grecia se ha convertido en el primer escenario del decisivo año electoral en España. La disputada batalla entre el PP y Podemos que pronostican las últimas encuestas publicadas, incluidos los sondeos internos del gurú popular Pedro Arriola, se va a comenzar a librar en el país heleno. Aunque el presidente del Gobierno dijo hace unos días que «cada país tiene su propia realidad» para referirse a la situación política de España y Grecia, los paralelismos son evidentes. En Grecia se celebran el 25 de enero unas cruciales elecciones en las que la formación de izquierdas Syriza, hermanada con Podemos, parte como favorita frente al partido conservador Nueva Democracia.
Rajoy dará su apoyo hoy en la capital helena al primer ministro griego, Antonis Samaras, en una cita que se cerró el pasado domingo en París, donde ambos mandatarios hicieron juntos el recorrido en la gran manifestación contra el terrorismo. Fue Samaras quien pidió a su homólogo español mantener una reunión bilateral esta semana.
Paralelismo con España
Rajoy considera que el Gobierno griego ha hecho un gran esfuerzo y ha sido muy valiente al realizar reformas para afrontar una situación muy difícil. Frente a la estabilidad que representaría, a su juicio, la victoria de Samaras, coloca la incertidumbre que se instalaría en la eurozona si ganara Syriza. La traslación a la política española es evidente, ya que el PP va a basar su estrategia electoral en presentarse como el partido de la estabilidad frente al retroceso y la pérdida de bienestar que representaría Podemos.
Si con esta visita Rajoy escenifica su respaldo al líder del partido Nueva Democracia, socio europeo del PP, Pablo Iglesias también lo hará participando en un mitin del candidato de Syriza, Alexis Tsipras, el día 22. Iglesias celebró el adelanto electoral griego diciendo: «2015 será el año del cambio en España y en Europa. Empezaremos por Grecia». El lunes mostró su apoyo al líder de Syriza a través de un vídeo difundido por Youtube en el que decía que hay dos opciones en Grecia, «el candidato cuyo nombre es Angela Merkel», representada por Nueva Democracia y los socialistas, y «el candidato griego cuyo nombre es Alexis Tsipras».
En esta situación de bipolarización, el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, se ha quedado descolocado. El PASOK, su tradicional aliado, está hundido en las encuestas. Lo que ha hecho Sánchez es tratar de liderar una salida a la crisis griega en los partidos socialistas europeos, que consiste en negociar la deuda helena y mutualizar toda la de los países de la moneda única.
El portavoz socialista en el Congreso, Antonio Hernando, calificó de «partidista» el viaje de Rajoy y señaló que en su lugar debería plantear «alternativas a la austeridad». En ese sentido, contrastó la irrupción del presidente del Gobierno con la reciente reunión de los líderes socialistas europeos, a la que asistió Sánchez, para buscar fórmulas para Grecia que superen las políticas de austeridad. La portavoz adjunta del PP en el Congreso, Beatriz Rodríguez Salmones, ironizó, lamentando que Sánchez no pueda viajar a Grecia para apoyar a los socialistas helenos del PASOK porque este partido ya es casi «extraparlamentario».
Rodríguez Salmones calificó además como «sorprendente» que los socialistas critiquen a Rajoy por hacer algo «habitual» como es respaldar a formaciones de la misma familia política durante los procesos electorales en otros países.