El presidente del Gobierno español y vasco coincidieron en Vitoria en la presentación del proyecto del Centro Memorial de Víctimas del Terrorismo
25 mar 2015 . Actualizado a las 05:00 h.«Unidad sin fisuras ante el fin del terrorismo», ese fue el mensaje que Mariano Rajoy lanzó ayer en Vitoria en presencia de Íñigo Urkullu, al que el lendakari respondió que el final de ETA abre un nuevo tiempo en el que hay que tener «altura de miras y poner en común una nueva política de Estado».
El presidente del Gobierno español y vasco coincidieron en Vitoria en la presentación del proyecto del Centro Memorial de Víctimas del Terrorismo, que se ubicará en la antigua sede del Banco de España y que pretende preservar y difundir los valores democráticos y éticos que representan las víctimas y mantener viva su memoria. Ambos presidentes descubrieron una placa conmemorativa y participaron en una jornada centrada en el terrorismo.
En este marco, Rajoy volvió a reclamar la unidad de los partidos y la sociedad ante ETA, porque «es el mejor homenaje que se puede hacer a las víctimas y a los valores de dignidad y justicia que encarnan».
Para el lendakari Íñigo Urkullu se ha abierto «un tiempo nuevo», tras cinco años sin asesinatos de ETA y más de tres desde que la banda terrorista anunciara su cese definitivo. «Vivimos una oportunidad para consolidar la paz y fortalecer la convivencia», señaló en el acto conjunto con Rajoy, al que asistieron también los ministros de Sanidad, Interior y Trabajo. Urkullu pidió la colaboración de las instituciones para «construir políticas de memoria a las víctimas».