El presidente catalán, en un gesto inhabitual, no acudirá esta noche a la entrega del premio, días después de que la editorial decidiera irse de Barcelona a Madrid
15 oct 2017 . Actualizado a las 09:23 h.Entre el millar de autoridades e invitados que esta noche asistirán, en el Palacio de Congresos de Cataluña, a la entrega del Premio Planeta de novela no estará el presidente catalán, Carles Puigdemont. El año pasado sí estuvo en la cena literaria, acompañando a los reyes, y en ediciones anteriores lo habían hecho tanto Artur Mas como Jordi Pujol. La que tampoco ha asistido al evento desde que tomó posesión de su cargo es la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau.
Con muchas reservas, el presidente del grupo, José Crehueras, indicaba a última hora de la mañana de ayer que al acto de hoy asistirían la presidenta del Congreso, Ana Pastor, el consejero Santi Vila (el único del Gobierno catalán que ha discrepado abiertamente de la deriva independentista del presidente) y «tal vez el consejero de Cultura», apuntó, antes de insistir en que podía haber cambios. Mientras que en años anteriores las confirmaciones de los políticos que asistirían a la entrega del premio literario las recibían los organizadores con bastantes días de antelación, en la mañana de ayer seguían pendientes de ellas.
El Grupo Planeta anunciaba hace unos días la decisión de cambiar su domicilio social de Barcelona a Madrid, algo que explicaba ayer su presidente José Crehueras: «Los proyectos empresariales requieren marcos estables y reglas de juego claras para que podamos desarrollar el proyecto empresarial; es por eso por lo que, para gestionar los intereses de nuestros accionistas, de nuestros colaboradores, de nuestros trabajadores, de nuestros autores... hemos tomado la decisión, ante la inseguridad jurídica, de trasladar el domicilio social a Madrid, cosa que se hizo efectiva hace dos días». Aunque al inicio de su comparecencia, junto con los miembros del jurado del premio y otros responsables de la editorial, Crehueras se mostró partidario de hablar más de libros que de política, fue esta última la que ocupó buena parte de su intervención.
Aseguró Crehueras que la decisión del traslado fue dolorosa: «Porque nosotros nos sentimos parte de Barcelona, de Cataluña y de España». En esta línea, argumentó: «Somos primeros en la publicación en lengua española; somos segundos en lengua francesa y somos primeros en catalán», y recordó los proyectos editoriales de la firma en París, Italia o México. También destacó que con el traslado se mantendrán los puestos de trabajo y la actividad en cada centro laboral y que la intención de Planeta es seguir celebrando la entrega de su principal premio literario en Barcelona. No obstante, recordó que las tres primeras ediciones habían tenido lugar en Madrid.
En cuanto a una posible vuelta de la sede social de la empresa a Barcelona si cambia la situación política, Crehueras afirmó: «El traslado a Madrid es definitivo». Pero destacó: «Hemos contribuido, hemos puesto nuestro granito de arena, a que Barcelona sea considerada hoy la capital mundial de la edición en español».
Récord de participación, con 634 originales presentados
La 66.ª edición del Premio Planeta ha sido un récord de participación, con 634 originales presentados, de los cuales 12 fueron enviados desde A Coruña, tres desde Pontevedra y dos desde Ourense. Este es el galardón literario en castellano con mayor dotación económica, 601.000 euros para la novela ganadora y 150.250 para la finalista. Entre las diez finalistas hay una, «La isla de las musas», presentada con el seudónimo de Ricardo Pedreira Ulloa, cuyo protagonista se instala en una isla gallega. En la foto, el jurado (A. Blecua, F. Delgado, R. Regás, C. Posadas, J. Crehueras, presidente de Planeta, J. Eslava Galván y P. Gimferrer) posa con los manuscritos finalistas.