La presidenta andaluza se queja de que la citen en vísperas de las elecciones
09 nov 2018 . Actualizado a las 05:00 h.Se esperaba una sesión bronca y la hubo. La comparecencia de Susana Díaz en la comisión de investigación sobre la financiación de los partidos del Senado (en la que solo participa el Partido Popular) fue tensa desde el inicio. La presidenta de la Junta denunció que su citación solo buscaba someterla en puertas de las elecciones andaluzas a un «juicio político» por parte del portavoz de los populares, Luis Aznar. Se quejó de que su convocatoria ante este órgano solo respondía a intereses electorales porque en los cinco años en que ella ha ocupado cargos en el Gobierno autonómico andaluz no ha habido irregularidades.
«Las elecciones condicionan mi presencia aquí», denunció en referencia a los comicios que tendrán lugar el 2 de diciembre. Su comparecencia, dijo, solo responde al «interés de alguno de querer contaminar el debate público con el trabajo de esta comisión», se lamentó la presidenta andaluza. Aznar replicó que fue citada el pasado 25 de septiembre, «antes de que nadie supiera cuándo eran las elecciones».
Más allá de la polémica por su comparecencia en sí, Díaz se esmeró en desligarse de etapas pasadas y de dejar claro que el caso de los ERE irregulares, que se encuentra en la recta final de la fase de juicio oral, no afecta a las cuentas de los socialistas. «No hay ninguna causa en Andalucía que vincule al PSOE con financiación irregular». «Los ERE -prosiguió- son posteriores a mi etapa de responsabilidad y no están vinculados a la financiación del Partido Socialista». «En los cinco años que he presidido la Junta, no hay una sola mancha». Y poco más de datos o investigación, porque la comisión derivó en un continuo rifirrafe entre Díaz y Aznar, sobre todo a partir de que el senador del PP felicitara a la jefa del Ejecutivo andaluz por su «gracejo» al responder las preguntas. El comentario encendió a la compareciente, que le reprochó que se metiera con su «acento» o «su habla». El senador popular le recriminó que «se haga siempre la mártir». La situación se enlodó más cuando Aznar acusó a la presidenta de la Junta de Andalucía de «enchufar» a familiares suyos cuando «un millón de andaluces se iban al paro».
Compañero, no jefe
Díaz respondió con toda la artillería. Le dijo a Aznar que era un intento «desesperado» que sacara a colación a su marido, José María Moriche, «un currante» que cobraba entre 700 y 1.000 euros al mes y que fue despedido cuando ella llegó a la Junta. «Los currantes no suelen comer con Villarejo o llegar en Jaguar a casa», le dijo en referencia a Dolores de Cospedal o Ana Mato.
En otro momento de la comparecencia, Díaz puntualizó a Aznar que el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, no es su jefe sino un compañero, porque sus jefes «son los andaluces». Cuando Aznar le preguntaba sobre las cuentas de la Fundación Alfonso Perales, Susana Díaz señaló que el PSOE tiene un CIF único y que todas las cuentas se llevan desde la sede federal en Madrid. Le recordó al senador del PP que ella perdió «unas primarias», por lo que no se encarga de las cuentas.
El PP interrogará a Iglesias el 3 de diciembre sobre la financiación de Podemos
La Comisión de Financiación de los Partidos Políticos del Senado puso ayer fecha a la comparecencia del líder de Podemos, Pablo Iglesias, el próximo 3 de diciembre, para preguntarle por las cuentas de su partido. La comisión, que maneja en solitario el Grupo Popular, acordó además que ese mismo día sea convocado el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Venezuela en el exilio, Miguel Ángel Martín Tortabu, al entender que su testimonio puede aportar datos sobre la financiación de Podemos.
El interés del PP es indagar en la «posible financiación» recibida por los fundadores de Podemos y entidades afines desde Venezuela antes de que la formación morada despegara electoralmente en España hasta convertirse en la tercera fuerza política.
También Chaves y Griñán
Ya había anunciado el PP que convocaría a Iglesias antes de final de año, y ha decidido hacerlo en una fecha significativa en el calendario político, ya que la víspera del 3 de diciembre se celebran las elecciones autonómicas en Andalucía. Tres días antes de que tengan lugar estos comicios están citados a declarar en la misma comisión los expresidentes de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves y José Antonio Griñán, después de que los populares pusiesen la diana en los principales implicados del caso de los ERE, un juicio que afronta estos días su recta final.