El presidente gallego cree que Sánchez está consolidando dos niveles de ciudadanía y ve «ilegales» algunas de las negociaciones
20 feb 2020 . Actualizado a las 19:03 h.El presidente gallego ha cargado con dureza contra el Gobierno de Pedro Sánchez por estar poniendo sobre la mesa transferencias que hasta ahora habían sido «negadas sistemáticamente» cuando el PP y el PSOE tuvieron el poder. A su entender, de confirmarse algunas de las cesiones que se quieren negociar con Cataluña y el País Vasco se estaría consolidando una «asimetría insultante», un hecho que calificó como «gravísimo» para el Estado de las autonomías porque va a suponer que existan dos niveles de ciudadanía. «Este tipo de bromas empiezan a no serlo, esto es muy serio», afirmó Feijoo en la rueda de prensa posterior a la reunión de su Ejecutivo.
El titular de la Xunta puso el acento en el acuerdo para el traspaso de la gestión de la Seguridad Social, que calificó de «hecho sin precedentes», y abrió varios interrogantes: «¿La gestión será del Gobierno vasco y sus consecuencias las pagaremos el resto, la caja única de la Seguridad Social? ¿Va a decidir sobre las horas extraordinarias, el régimen de la Seguridad Social de lo que pagan las empresas vascas, los conceptos para integrar la base de cotización y todo pagado con la caja única?», censuró Feijoo, para a continuación solicitar información al Gobierno que sea explícito al informar sobre «qué se transfiere exactamente y quién lo va a pagar». Además, le pareció «preocupante» que la negociación se abra en plena precampaña electoral en el País Vasco «para conseguir los votos del PNV» en el Congreso.
Negociar lo «innegociable»
Más intranquilo incluso se mostró con todo lo que Sánchez pueda tratar con Torra en las próximas semanas, por tratarse de asuntos que todavía no son conocidos para la opinión pública. Para Feijoo, los precedentes para esta mesa de negociación con asuntos «innegociables» son peores, porque se están enmarcando en una «escenografía» muy concreta, con el presidente catalán recibiendo al de España «como si fuera el jefe de Estado de la nación catalana, de tú a tú» y con un tono de conflicto diplomático entre iguales, reprochó.
«Los gallegos no merecemos esta asimetría atípica, no es razonable, porque mientras el Gobierno central está negociando cosas ilegales, aquí no pagan la deuda del IVA, no dan fechas del AVE y estamos a punto de perder cinco mil empleos en la industria. Mientras sea presidente de la Xunta voy a defender a Galicia sin condiciones y sin hacer seguidismo a nadie, espero que los gallegos tomen nota».