Villarejo señala a Rajoy: «¡Las maldades que me han encargado a mí para salvarle el culo al 'Barbas'!»
ESPAÑA
El levantamiento del secreto de la operación Kitchen saca a la luz nuevas y comprometedoras cintas del excomisario que apuntan directamente al expresidente del Gobierno
28 sep 2020 . Actualizado a las 22:28 h.El levantamiento prácticamente completo del secreto de sumario de la operación Kitchen apunta directamente a Mariano Rajoy y apuntala las sospechas de que el expresidente del Gobierno pudo estar al tanto de la contabilidad B que durante años existió en el partido. Las grabaciones encontradas en poder del excomisario José Villarejo no solo confirmarían que el PP contrató al expolicía y a su camarilla para espiar a Luis Bárcenas, sino que incluyen referencias a la presunta financiación irregular del partido.
En una de las grabaciones de Villarejo con su socio Adrián de la Joya y que figura en los doce tomos que este lunes vieron la luz, el excomisario asegura: «¡Tengo al Rato inmortalizado diciéndome que el otro (Rajoy) trincaba!». Villarejo, que tilda de «delincuentes» y «chorizos» a los dirigentes del PP, reproduce en esa conversación una confesión que, según el expolicía, le dijo el exvicepresidente, en referencia al supuesto pago de sobresueldos en negro en la cúpula del PP procedente de comisiones: «Yo estaba en la fila... Rajoy iba delante mía y cada uno con el sobre».
Las cintas de Villarejo que el juez Manuel García-Castellón desclasificó este lunes no son solo delicadas para Rajoy por el tema de la supuesta financiación ilegal de la formación, sino que también le implican en la propia operación parapolicial para espiar al extesorero popular. Y es que, en otra de las grabaciones, el excomisario asegura que el exsecretario de Estado para la Seguridad con el ministro Jorge Fernández, el ya imputado en este procedimiento Francisco Martínez, al que identifica como 'Paco', llegado el momento «tirará para arriba» (tirará de la manta) porque «él le daba todas las novedades al 'Asturiano'», el nombre en clave con el que Villarejo y los policías a su servicio en el caso Kitchen se referían al expresidente Rajoy.
«A veces por la noche hablaban Eugenio Pino (ex DAO de la Policía) y Paco por el tema Cocinero (sobrenombre del chófer de Bárcenas y que dio nombre a la operación parapolicial) y éste le decía que el 'Asturiano' le preguntaba qué hay de esto y qué hay de lo otro, porque era lo único que le preocupaba».
Rajoy «podía estar preso»
Villarejo, en otras de sus conversaciones sobre sus investigaciones para el PP, admite sin ambages que en el partido le han encomendado trabajos irregulares, incluidos encargos para borrar la huella de Rajoy en algún asunto relacionado con Bárcenas. «¡Las maldades que me han encargado a mí para salvarle el culo al 'Barbas'!», dice el excomisario a unos periodistas, de acuerdo con la transcripción hecha por los investigadores de Asuntos Internos y que consta en un informe fechado este pasado mayo. «¡No te puedes ni imaginar! ¡Qué podía estar preso! El presidente del Gobierno, eh, por muchas cosas... y se han perdido papeles y se han perdido cajas y se han perdido muchas cosas (...) decir, oye en tal sitio hay papeles de Bárcenas, hay que ir a romperlos».
En esta conversación con periodistas de su confianza en noviembre del 2017, poco antes de su detención, Villarejo, que ya presiente que su futuro es negro, se lamenta de que ahora nadie dé la cara por él a pesar de que cumplió fielmente con el encargo del PP de «esconder cien cajas de la Gürtel» en el 2009.
«Facturas falsas»
En otras de sus últimas conversaciones grabadas por el propio Villarejo y encontrada por Asuntos Internos en su domicilio, el excomisario ya presiente que nada bueno le va a pasar pero avisa a sus interlocutores, los empresarios Adrián de la Joya y Alberto Pedraza, que si él cae se puede llevar por delante a varios dirigente del PP porque tiene todo tipo de «pruebas contra ellos», desde «las facturas falsas que hicieron con Paco Villar y el grupo parlamentario popular para justificar unos pagos de la imagen de Soraya», pasando por «todas las grabaciones entre Bárcenas y el puto Rajoy hablando de toda la mierda» o acabando con el robo de documentación sensible que el extesorero escondía en un «zulo» del estudio de su mujer, Rosalía Iglesias, y que fue robada por el equipo parapolicial de Villarejo.
«El tonto polla del 'Asturiano' (Rajoy) me toca la polla. Me podrá? meter en el maco (cárcel), me podrá 'no se qué'. pero le busco una avería que se caga, ¿eh? Le busco una avería que se caga», avisa el policía.
En sus confesiones, Villarejo también llega a reconocer que a él le han tratado mejor los gobierno socialistas. «Mi experiencia con el PSOE es mucho mejor con el PP, me han hecho ganar pasta». No obstante, asegura que en los últimos años ha proporcionado «gloria bendita» a los populares, «unos mierdas» que no les han dado ni las gracias.
«El troll y el emérito son los más chusma»
José Villarejo se despacha a gusto en las grabaciones que ahora han visto la luz contra su archienemigo, el exdirector del CNI Félix Sanz Roldán, al que ha culpado siempre de todas sus desgracias, y contra Juan Carlos I. El motivo de su inquina contra ellos es que -siempre según el excomisario y su interlocutor, su socio Adrián de la Joya- ambos están detrás de las «amenazas de muerte» que habría recibido la amiga íntima del exjefe del Estado, Corinna Larsen.
Villarejo, que está imputado precisamente por acusar de esas amenazas al exjefe de los servicios secretos, y De la Joya, que en su momento llegaron a encontrarse en varias ocasiones con la empresaria alemana en la casa de ésta en Londres, se refieren a la examante de don Juan Carlos como «una mujer maravillosa» y «auténtica», que según De la Joya «tiene cáncer de pecho del daño que le ha hecho el Rey, de las amenazas que le han hecho, amenazándola de muerte».
«El troll (sobrenombre que le dan a Sanz Roldán) y el emérito, los dos más hijos de puta y más chusma y más chusma... y más chusma», llega a afirmar Villarejo refiriéndose a esas «amenazas». El excomisario se queja de que 'el vejete' (Sanz) lo que tenía que haber hecho era hablar con el «soplapollas del emérito» para convencerle de que se encaprichara de otra «chorbita» y «dejara tranquila» a Corinna.
«Se le saltaban las lágrimas de lo que le han hecho (Juan Carlos I y Sanz Roldán)», afirma De La Joya sobre la amiga del emérito, tras haberse encontrado con ella.